Tucumán: manifestación popular y renuncia del jefe de Policía

tucumanLa dimisión fue aceptada por el gobernador Alperovich. Autoridades provinciales confirmaron la muerte de 4 personas.

Tras la violenta represión del martes a manifestantes que reclamaban protección policial en medio de la protesta de efectivos y saqueos que tuvieron lugar en la provincia, el jefe de Policía de Tucumán, Jorge Racedo, renunció a su cargo. Pero el clima de tensión se mantenía y anoche, unos 15 mil manifestantes se habían concentrado para protestar contra el Gobierno provincial en la Plaza Independencia, en San Miguel. Y había proclamas contra “la extorsión policial” y la represión sufrida la noche anterior.

La dimisión de Racedo fue rápidamente aceptada por el gobernador Jorge Alperovich quien consideró que en la protesta frente a la Gobernación hubo “infiltrados” y lanzó: “Los policías tendrían que haber aguantado, pero no reprimir”. ”.

El malestar de la sociedad tucumana no es solamente con la Policía. Es que comenzaron a circular imágenes de la concesionaria de autos de la familia Alperovich con las vidrieras vacías, como medida preventiva. Se cree que gracias a alguna información previamente obtenida, el gobernador mandó retirar de su concesionaria “León Alperovich” todos los autos exhibidos en el local. Según detallaron periodistas locales, las concesionaria de Alperovich fue unos de los pocos comercios de la provincia que no perdió la custodia policial durante el conflicto.

En este contexto enrarecido, y tras la confirmación de cuatro personas fallecidas a causa de los saqueos, Tucumán amaneció envuelta en el miedo. A los tres muertos informados hasta ayer, se le agregó un cuarto: un hombre que llegó con un balazo en el pecho al Hospital Padilla. Se elevó así a diez la cifra de muertos en todo el país desde que se inició la rebelión policial en Córdoba, seguida por saqueos.

Durante la madrugada de ayer, los vecinos en Tucumán -atemorizados ante posibles saqueos y ataques- estuvieron armados con pistolas, cuchillos y palos.

Así, tras el acuerdo salarial alcanzado entre Alperovich y los policías, la provincia aún se encuentra sacudida y cruzada por el terror que causaron los saqueos en los últimos días.

Fuente: La Razón