Confirmaron otro muerto en Tucumán y ya son 12 las víctimas tras la revuelta en 20 provincias

saqueoEl reclamo policial de aumento salarial se extendió por casi todo el país: sólo en cuatro distritos no se registraron rebeliones ni saqueos en los últimos días

Doce personas murieron en la última semana tras la ola de revueltas policiales y saqueos que sacudió a casi todo el país. La última muerte confirmada es la de un hombre de unos 30 años que falleció en las últimas horas en Tucumán al ser baleado aparentemente por vecinos que custodiaban un barrio de la periferia sur de la capital para evitar saqueos, informaron fuentes de la Guardia del Hospital Padilla.

Buenos Aires. Hace una semana, durante las protestas derivadas de un corte de luz que afectó a parte del conurbano tras el temporal del lunes, una persona murió en medio de un intento de saqueo. Lin Zhang Xian, un comerciante chino que intentó evitar a los balazos que saquearan su supermercado en Glew, murió después de que los atacantes volvieran al lugar y lo incendiaran.

Córdoba. En la ciudad capital se desató -hace una semana- el primer reclamo policial. Javier Alejandro Rodríguez, de 20 años, murió tras recibir un balazo en la espalda mientras iba en moto con otro joven por un descampado en el sur de la ciudad. Ambos habrían participado de un robo a una casa de electrodomésticos ubicada allí cerca.

Jujuy. En Perico, 37 kilómetros al sur de la capital provincial, un joven cuya identidad no trascendió murió el domingo en un intento de saqueo a un local de ropa deportiva. Habría recibido un puntazo en medio de un forcejeo entre otro supuesto saqueador y el cajero del comercio. Murió en el acto.

Chaco. En la ciudad de Resistencia, epicentro del reclamo policial en Chaco, murieron cuatro personas. En un intento de evitar un saqueo, el oficial de policía Christian Vera, de 35 años, cayó herido de un balazo. Murió poco después en el hospital. Ricardo Romero, de 23 años, habría intentado entrar a un comercio: fue asesinado por el dueño del local.

El lunes, Carlos Luis Silva y Anabella Ojeda estaban en el lugar donde cayeron Vera y Romero. Según el gobernador Juan Carlos Bacileff Ivanoff, sus muertes «no tuvieron nada que ver con los saqueos».

Tucumán. En la provincia comandada por José Alperovich, la huelga policial se levantó ayer. Un joven murió mientras escapaba en moto con mercadería robada. Otro, de 33 años, murió en el hospital por lesiones con arma de fuego en el abdomen. Un tercero murió por una herida de bala en la cabeza. Y un cuarto, de 30 años, murió al ser baleado aparentemente por vecinos que custodiaban un barrio de la periferia sur de la capital para evitar saqueos. Sus identidades no trascendieron.

Entre Ríos. Según confirmó el mandatario provincial, Sergio Urribarri, un hombre que participaba de un intento de saqueo murió electrocutado.

SÓLO EN CUATRO PROVINCIAS NO SE REGISTRARON REBELIONES NI PROTESTAS

PARA CAPITANICH EL PROBLEMA ESTÁ RESUELTO

Pese al número creciente de víctimas fatales registradas en las últimas horas, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, sostuvo esta mañana que «se avizora un clima de paz y tranquilidad pública» en las provincias donde se produjeron saqueos amparados en protestas policiales, por lo que consideró que «la situación está encauzada y resuelta».

Además, enfatizó que «existe una perspectiva de normalización en cada una de las provincias», al hablar con la prensa durante su habitual conferencia matutina en la Casa Rosada.

«Entendemos que en el día de la fecha se avizora un clima de paz y tranquilidad pública en virtud de que se han podido establecer los mecanismos para garantizar el efectivo funcionamiento de las fuerzas de seguridad en cada una de las jurisdicciones provinciales», dijo Capitanich.

Con respecto a la actitud de los policías que reclamaron la suba de sus salarios, acusó: «Los policías discuten de manera extorsiva». Además, destacó la participación de fuerzas como Gendarmería en las provincias y rechazó críticas de algunos gobernadores que se quejaron por la demora en el arribo de los efectivos nacionales a sus respectivos distritos.

«No es una cuestión automática, que se piden y llegan a una velocidad supersónica. Cuando exigen la presencia de Gendarmería se debe observar que la demanda lleva un tiempo, con la organización, el traslado y la intervención en el territorio», aclaró.

Fuente: LA Nación