Córdoba: Una patota atacó a ambientalistas que protestaban contra Monsanto

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Un grupo de personas presuntamente vinculado a la Uocra atacó a manifestantes que acampaban en rechazo al predio donde se construye la planta de Monsanto en la localidad cordobesa de Malvinas Argentinas. Para la compañía fueron los ambientalistas quienes inciaron los incedentes.

Manifestantes que acampaban en rechazo al predio donde se construye la planta de Monsanto en la localidad cordobesa de Malvinas Argentinas denunciaron hoy que fueron agredidos por un grupo de personas «de la Uocra».

«Hoy a las siete de la mañana llegó una patota de la Uocra que nos agredieron a los que estamos acampando, han robado celulares, computadoras, la Policía no estaba», denunció la ambientalista Vanina Barboza Vaca y agregó que «hay más de 20 compañeros heridos».

Por su parte, desde la firma multinacional aseguraron que los manifestantes, que mantienen un bloqueo al predio desde hace más de dos meses, «destruyeron» los autos de los trabajadores.

«Los manifestantes han destruido los autos de todos los trabajadores y de todos quienes estamos en la planta. Hubo un enfrentamiento con los trabajadores y se han roto materiales del obrador», dijo el gerente de Relaciones Institucionales de la firma multinacional, Adrián Vilaplana.

En declaraciones a Todo Noticias, la ambientalista Barboza Vaca dijo que permanecerán en el predio, ratificó el «bloqueo por tiempo indeterminado» y alertó que «ninguno» de la «patota» era «obrero de la planta de Monsanto».

A su vez, la manifestante Esther Quispe aseguró a radio Mitre Córdoba que unas «60 personas llegaron en colectivos (al acampe en la ruta A-88), con palos golpearon a los chicos que estaban en las carpas».

En tanto, Sofía Gatica, de la asociación Madres de Ituzaingó Anexo, también acusó «a la Uocra» que, aseguró, «atacó» a «mujeres, niños, jóvenes».

Para Monsanto, la culpa es de los ambientalistas

Pero, según expresó la propia Monsanto a través de un comunicado, quien inició los incidentes fue el grupo de ambientalistas.

“Repudiamos la violencia generada por un grupo de activistas cuando un grupo de trabajadores intentaban ingresar a nuestra planta a realizar tareas de mantenimiento. Nos solidarizamos con nuestros empleados que han sufrido daños en sus vehículos al ser apedreados por un violento grupo de activistas”, señaló la compañía.

Además, señala que “rechaza” las “manifestaciones de violencia que se vienen generando a diario por un grupo de activistas que impiden que se pueda continuar normalmente con la construcción de la planta a pesar de contar con las aprobaciones y fallos judiciales que avalan nuestro derecho a construir”.

“Lamentamos que no nos permitan ejercer nuestro derecho de continuar con la construcción de la planta y que haya grupos que recurran a la violencia como único camino para expresar sus diferencias”, indica el comunicado.
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