Ayer, un juez ordenó desalojar a los efectivos acuartelados en la Jefatura. El ministro de Seguridad provincial instó a los manifestantes a abandonar pacíficamente las instalaciones. La renuncia del jefe de la fuerza.
Pese a los anuncios de las medidas judiciales y gubernamentales, sigue el conflicto en la Policía de San Luis.
Los efectivos, que desde ayer tienen tomada la Jefatura Central, reclaman desde la semana pasada aumentos salariales y mejoras laborales. Es por estas protestas que el Gobierno de la provincia despidió a 51 agentes, decisión que desencadenó esta medida de fuerza que provocó el autoacuartelamento.
El ministro de Seguridad de San Luis, Martín Olivero, comunicó que el juez del Crimen N° 2 ordenó el desalojo del edificio de la Jefatura. De todas formas, en un mensaje emitido por la Agencia Provincia de Noticias, hizo un llamado a abandonar pacíficamente las instalaciones. Por otro lado, el jefe de la Policía de San Luis, Miguel Ángel Ubietta, renunció a su cargo en medio del conflicto interno que atraviesa la fuerza provincial.
Mientras tanto alrededor de 300 policías mantienen tomada la sede principal e instalaron una carpa en Villa Mercedes, a 90 kilómetros de la capital.
Fuente: TN