Carlos Bianchi tiene diez razones para confiar

BianchiEl presente de Orion, la presencia de Riquelme, los refuerzos, la limpieza y el vestuario son algunas de ellas.

El 10 es el número de las ilusiones futboleras. Allí habitan todas las glorias de los grandes jugadores de la historia. También viven en el número las esperanzas de los sacrificados enganches de pequeños equipos del ascenso del ascenso. Para Boca, que enciende sus optimismos de cara al debut en el Torneo Inicial, amparar sus creencias en una decena de cuestiones es una buena manera de enmarcar el panorama. ¿Cuáles son las razones por las que Carlos Bianchi puede soñar?

1-Agustín Orion.

El arquero es una de las grandes figuras del último tiempo. Es el capitán y uno de los referentes del equipo. Los rendimientos de Orion no dejan dudas. Es de lo mejor de Boca. Su mayor ambición es ser parte del plantel que juegue el Mundial 2014. Para ello, su actuación en el próximo semestre será clave. ¿Logrará ganarle el puesto de tercer arquero a Oscar Ustari?

2-Daniel Díaz.

El Cata era el hombre necesario para acomodar la defensa. Su llegada parece haber solidificado las actuaciones de Guillermo Burdisso y Matías Caruzzo. Díaz aporta desde lo individual, pero sostiene el armado colectivo. Es salida limpia por abajo y termómetro para adelantar la última línea. Además, claro, tiene un plus en la pelota parada.

3-La limpieza.

Bianchi encaró una depuración necesaria y esperada. Los restos de la era de Julio César Falcioni habían dejado un plantel lleno de nombres importantes y vacío de buenas actualidades. Los ciclos de Santiago Silva, Lucas Viatri, Leandro Somoza y Clemente Rodríguez estaban terminados. A veces es preferible tener menos generales y sostener la compensación con soldados fieles.

4-Los refuerzos.

Además de la garantía del Cata Díaz , que será titular, hubo cinco llegadas más. Fernando Gago podrá sumarse a la formación recién después de la cuarta fecha. En la pretemporada se vieron cosas interesantes por parte de Franco Cangele y Emmanuel Gigliotti, dos buenos recambios en la delantera. También arribaron Emanuel Trípodi y Claudio Riaño, como apuestas para completar el plantel.

5-La identidad renovada.

El Boca de la pretemporada volvió al manual que había perdido en el último semestre. Presión sostenida en el campo rival, tenencia por medio de Riquelme y desequilibrio por afuera. Bianchi trabajó mucho en el cuidado para salir de modo más prolijo desde los defensores centrales. El equipo buscará asfixiar y recuperar rápido para elaborar el ataque en el campo rival.

6-Los que volvieron.

Emanuel Insúa y Jesús Méndez son los refuerzos que ya estaban en el club. Insúa volvió de un préstamo en Godoy Cruz y será el lateral izquierdo titular. Anduvo muy bien en la pretemporada. Méndez rechazó volver a Rosario Central y tiene sed de revancha. Ambos serán piezas importantes en el semestre.

7-Los pibes del club.

Juan Sánchez Miño, Nicolás Blandi y Leandro Marín son los jugadores de la cantera que se ganaron su lugar durante el semestre pasado. Los tres serán titulares. Miño aporta jerarquía en cada pelota. Blandi se quedó con la nueve a base de goles. Marín se hizo cargo de un puesto que quemaba.

8-El vestuario.

Contrariamente a lo que se piensa, el clima interno de Boca está en un buen momento. Las salidas de algunos hombres que realizaron declaraciones fuertes aliviaron la tensión. Hay pronóstico soleado en Casa Amarilla.

9-No hubo lesiones.

A diferencia de la pretemporada de comienzos de año, la preparación no reportó problemas musculares en el plantel. El cuerpo técnico armó un trabajo con muchos ejercicios de balón, con el fin de darle otro entramado de juego al equipo.

10-Juan Román Riquelme.

Boca sigue contando con el mejor jugador del fútbol argentino. El equipo se moverá al ritmo de su idea. Bajo su ala deberán crecer Sánchez Miño e Insúa. Tener a Riquelme es, hoy por hoy, ejercer una militancia de la pelota bien jugada. La mejor garantía para el optimismo

Fuente: Clarín