Ya llegaron el arquero Alvarez y Elizari. Hoy firmarían Cauteruccio y Más. Avanzan por Fontanini y por Cavallaro. Recuperó a Ortigoza.
Aquella teoría del Bambino Veira que afirmaba que en el Nuevo Gasómetro “nació el viento” quedó nula ayer. Seguramente el ídolo de San Lorenzo nunca caminó una mañana de julio por el complejo Sofitel de Cardales, lugar en que el conjunto de Boedo se encuentra realizando la pretemporada desde el lunes. Dentro de esa extensión de hectáreas al costado de la ruta 9, que incluye canchas de fútbol de primer nivel, lagos artificiales y un salón de conferencias grande como un campo de juego, en la mañana helada del feriado por el Día de la Independencia, Juan Antonio Pizzi dirige la práctica.
Mira el grupo y se ilusiona.
Sabe que tiene con qué. Que la materia prima está allí esperando que la moldeen y le den forma de campeón …San Lorenzo puso primera cuando el resto ni siquiera había dado la vuelta de llave.
Fue al grano y llenó esos casilleros que el equipo necesitaba reforzar con nombres que Pizzi, junto al manager Bernardo Romeo, ya tenían en carpeta desde hace tiempo. Y los resultados están a la vista. Basta con mirar a los otros grandes: River apenas contrató a Osmar Ferreyra, en Boca sigue la novela por el Cata Díaz y Racing no termina de cerrar sus negociaciones… San Lorenzo es la excepción. Y lo hace pensando en conseguir un título ya, aunque también con proyección.
Los refuerzos que ya llegaron y los que podrían venir ni siquiera se arriman a los 30 años.
Detalles que hacen a la cuestión: en el partido por la Copa Argentina, cuando San Lorenzo enfrentó a Atlético de Rafaela en San Juan, el presidente Matías Lammens acordó de palabra la incorporación de Emmanuel Más (24 años) con su par Jorge Miadosqui. Ayer el lateral se sometió la revisión médica y en estas horas firmará su contrato. Otra: la dirigencia ya había preguntado precios por Fernando Elizari (22) y Martín Cauteruccio (26) en las últimas fechas del Torneo Final y comenzó las negociaciones no bien culminó la jornada 19. Hoy ambos son patrimonio del club a pesar de que tuvieron ofertas del país y también del exterior. De la misma manera actuó con Cristian Alvarez (27), quien luego de haber atajado cinco años en el Español de Barcelona llega para adueñarse del arco, también soñando con la Selección y sabiendo que su lugar es deseado por Sebastián Torrico (renovó por dos años). A ellos hay que sumarle la base que terminó la temporada, aunque faltan resolver las renovaciones de Ignacio Piatti y Santiago Gentiletti, más otros que pueden llegar como Fabricio Fontanini (23) y Juan Ignacio Cavallaro (19).
Ratificando que piensa a futuro, San Lorenzo hizo otras apuestas: el central Valentín Perales (17), de Cipolletti de Río Negro, y Santiago Magallán (21), volante de Gimnasia La Plata, quienes realizan la pretemporada con la reserva a cargo de Fernando Kuyumchoglu.
¿Y por qué San Lorenzo cerró a varios cuando otros aún no pudieron hacerlo? El dueto de palabras “proyecto serio” es el más mencionado por aquellos que aparecen en las orillas del club. Desde allí se construye un futuro que, desde los hechos actuales, resulta creíble. La decisión de la comisión directiva de darle a Pizzi un contrato por dos años así lo demuestra. La famosa frase “dos jugadores por puesto” es una realidad al repasar el plantel que el DT hoy comanda.
Con este panorama, la ilusión del hincha de conseguir títulos luego de 6 años de sequía vaya si tiene fundamentos.
Fuente: Clarín