Belén, la niña de once años embarazada de más de tres meses tras ser presuntamente violada por su padrastro, ha reabierto la discusión sobre el aborto en Chile. Mientras tanto, ella juega con su muñeca como lo haría cualquier niña de su edad.
Sin embagro, su infancia se ha visto rota. Embarazada de 14 semanas como consecuencia de los constantes abusos sexuales por parte de su padrastro, la pequeña debe continuar con la gestación adelante porque abortar se considera todavía un crimen en su país.
El caso de Belén salió esta semana a la luz gracias a su abuela, quién se encargó de denunciar al agresor, de 32 años, quien tras confesar los abusos fue detenido de inmediato aunque la madre de la menor los negara
Ahora el caso de Belén ha reabierto el debate en pleno proceso electoral: aborto en casos extremos ¿si o no?.De momento, la única partidaria es la candidata y ex presidenta, Michele Bachelet, quien espera volver a alcanzar la presidencia en un país donde la tasa de embarazo juvenil es elevada.
Según la Fiscalía de la región de Los Lagos, Belén, vive con su abuela, quien tiene su custodia legal, y visitaba los fines de semana a su madre, donde al menos en tres ocasiones en el último año fue violada por el hombre que convive con su progenitora. Desde el viernes pasado, el hombre está en prisión preventiva.
Fuente: ABC