Vanoli defendió la intervención de la CNV en las empresas

La versión de que la Comisión Nacional de Valores (CNV) podría aprovechar las facultades que le dio la nueva ley de mercado de capitales para intervenir en Papel Prensa o en Clarín estaba en boca de todos. Sin embargo, el presidente de la CNV, Alejandro Vanoli, evitó ayer referirse directamente al tema en un almuerzo en el que expuso convocado por el Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF). En el Gobierno, no obstante, algunas fuentes confiaron que la idea sería por ahora apuntar sólo a Papel Prensa, la empresa de la que son accionistas Clarín, S.A. LA NACION y el Estado nacional.

«En un momento en el que la Argentina discute con tanta pasión lo que debe ser el rol del Estado es importante recordar lo que pasó en los mercados de capitales en los últimos años», dijo Vanoli, para quien casos como los escándalos financieros de Enron, Worldcom o la crisis de hipotecas subprime en Estados Unidos prueban la necesidad «de que haya una persona neutral que vele por los intereses de los inversores».

«Nadie tiene que temer o asustarse porque la Argentina avance como todos los países, y que en el país la CNV tenga adecuados poderes de fiscalización en el marco de la ley», afirmó Vanoli, ante un auditorio de ejecutivos y especialistas en finanzas que poco a poco empezaron a dejar de prestarle atención y se adentraron en sus propias conversaciones. El presidente de la CNV no dio detalles de cómo será la reglamentación de la ley 26.831 de reforma del mercado, que se aprobó en los últimos días de 2012, ni quiso hablar sobre los artículos más polémicos pendientes de reglamentación.

Pero Vanoli no intentó tampoco negar en ningún momento lo que todo el auditorio hablaba por lo bajo. Sólo respondió cuatro preguntas que eligió de los papeles que le fueron acercando del público, y que no aludían a Clarín o a Papel Prensa.

Apenas aprovechó la última pregunta para defender la inclusión del polémico artículo 20° en la nueva ley, que es el que habilita a la CNV a intervenir en aquellas empresas en las que juzgue que ha sido perjudicado algún accionista minoritario, y la autoriza a desplazar a los órganos de administración de la compañía y nombrar un veedor por 180 días.

«[La de intervenir en las empresas y nombrar veedores] es una facultad que el Banco Central tiene para los bancos. La CNV la va a reglamentar y ejercer cuando haga falta en el marco de la ley y con prudencia», dijo.

Vanoli justificó además que hace tiempo que los organismos internacionales -como el Grupo de Acción Financiera Internacional, GAFI- estaban exigiéndole a la Argentina que la CNV tuviera un mayor poder de supervisión. «Había una percepción de falta de transparencia y de que no había adecuado control», explicó. «La Argentina atraviesa un momento complejo, pero tiene factores estructurales de fortaleza. Garantizo que la CNV va a actuar siempre cumpliendo las normas», sentenció el responsable del organismo que debe velar por el buen funcionamiento de los mercados, que dejó el salón escoltado por los organizadores del evento, para evitar cualquier contacto con la prensa que lo esperaba.

EL OBJETIVO, PAPEL PRENSA

De acuerdo a altas fuentes del Gobierno consultadas por LA NACION, por el momento no habría intervención en Clarín, pero sí la apuesta sería la expropiación de Papel Prensa. De todos modos, en la Casa Rosada entrevén que cualquier intervención podría ser impugnada en la Justicia por los dueños mayoritarios de la empresa, por lo que se descuenta que se sucedería una larga discusión judicial como la que aún se da con la ley de medios.

En el mismo Gobierno, confiaron las fuentes, consideraron la intervención de Clarín como una «torpeza» y como «altamente inconveniente» porque significaría un costo político alto para la presidenta Cristina Kirchner. El tema habría llegado a estar en consideración del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y de Vanoli, con la venia de la Presidenta, pero en los últimos días habrían decidido dar marcha atrás por la preocupación que causó el tema.

«Lo que sí es un hecho es lo de Papel Prensa, y a eso juega el Gobierno», señaló un funcionario con acceso a la mesa chica de la Casa Rosada. «Lo veo muy fuerte, expropiarán para tener la mayoría accionaria y luego seguramente habrá una larga discusión judicial con las impugnaciones que harán los propietarios», dijo otra fuente.

Fuente: LA Nación