Desde hoy funcionarán en Figueroa Alcorta y Sarmiento, y en Cabildo y Pico. Buscan alertar sobre demoras imprevistas y brindar caminos alternativos. Ya hay 20 en las principales avenidas de la Ciudad.
En busca de mejorar la fluidez del tránsito y evitar maniobras indebidas, la Ciudad continúa la instalación de carteles electrónicos en las principales avenidas para avisarles a los conductores sobre cortes por obras, manifestaciones u operativos por partidos de fútbol, recitales y maratones.
En la actualidad, funcionan 20 carteles de leyenda variable en las esquinas más transitadas y hoy se sumarán dos en Figueroa Alcorta y Sarmiento, y en Cabildo y Pico. La idea del Ejecutivo porteño es colocar otros ocho dispositivos en el segundo semestre del año, aunque no trascendió cuáles serán las avenidas.
Hasta ahora, según el análisis que hizo la Subsecretaría de Transporte porteño, los 20 carteles existentes se encuentran en diferentes tramos de Figueroa Alcorta, Del Libertador, 9 de Julio, Santa Fe, Corrientes, Avenida de Mayo, Belgrano, Entre Ríos, San Juan, Paseo Colón, Juan B. Justo y Córdoba.
Desde la Subsecretaría que conduce Guillermo Dietrich informaron que este sistema permite informar las dificultades del tránsito en tiempo real, ofrecer alternativas para disuadir la congestión vehicular y así mejorar la movilidad en la Ciudad.
Con igual objetivo, el Gobierno de la Ciudad ya había desarrollado herramientas inteligentes para comunicar a los vecinos la situación en el tránsito: Twitter (@batransito), BA Móvil (una aplicación para celulares que localiza la ubicación del usuario y brinda información actualizada sobre el tránsito, subtes y la red de ciclovías), semáforos LED con cuenta regresiva y el mapa de cortes que puede ser chequeado en la web www.movilidad.buenosaires.gob.ar.
“La congestión de tránsito es una realidad, pero es muy diferente saber con anticipación si una calle está cortada. Ahora el hombre lleva consigo tecnología que le ofrece información al instante”, había expresado el subsecretario Dietrich.
Fuente: LA Razòn