Los trabajadores denuncian precariedad laboral y reclaman mejores condiciones salariales. El chocolatero, por su parte, se desligó de la protesta: “A mí no me interesa manejar la empresa, yo estoy en otro rubro, que es el artístico”.
Trabajadores de la empresa de golosinas Felfort mantienen tomada la fábrica desde ayer en reclamo de mejores condiciones salariales y de seguridad laboral, y aseguran que continuarán con la medida de fuerza hasta que no obtengan una respuesta de la empresa.
Rodolfo Vidal, delegado gremial de la fábrica de chocolates y otras golosinas, dijo que se trata de «un conflicto de larga data por la falta de respuesta a reclamos de aumentos, incentivos, categorías y elementos de seguridad para los trabajadores».
La entrevista con el delegado gremial, que junto al resto de sus compañeros se encuentran realizando la toma en el comedor del segundo piso de la fábrica, se realizó vía telefónica desde la vereda, ya que los trabajadores decidieron no salir del lugar por temor a que no los dejen volver a entrar o que «la policía nos lleve presos, como nos amenazaron».
En cuanto a los reclamos salariales el sindicalista explicó que «primero pedimos un aumento porque los sueldos son bajos, luego un plus de pascuas y por último un adicional de 1.000 pesos, pero todo fue negado».
Vidal también denunció precarización laboral:»la empresa está cubriendo puestos fijos con personal eventual. Hay más de 200 trabajadores de un total de 700 en esa situación cuando hay un fallo judicial que determinó que Felfort no tiene trabajos eventuales».
Asimismo, denunció la falta de medidas de seguridad ya que «las puertas de emergencia están soldadas y no se pueden abrir, no hay instructivos de evacuación y no se realizan los dos simulacros de incendio por año obligatorios».
«El otro día hubo un principio de incendio en el laboratorio interno y una compañera casi muere asfixiada», aseguró el delegado gremial.
Los empleados también denunciaron que Ricardo Fort aparece en la fábrica sólo para retirar dinero, y él respondió: «Yo en la fábrica ni aparezco. Nunca voy».
Sobre los reclamos que hicieron los trabajadores dijo: «Yo ni aparezco por la fábrica. No me interesa manejar la empresa, yo estoy en otro rubro, que es el artístico. Cuando toman una planta estas personas no dejan entrar a las otras que sí quieren trabajar. Le prohíben la entrada», expresó.
«La fábrica tiene 100 años y por eso las condiciones para trabajar las tienen. Si no pueden entrar no es porque no quieren si no porque un grupo reducido está tomando la fábrica. ¡Chicos, laburen!», dijo indignado.
«Mi madre de 80 años salió a la calle a hablar con ellos ayer. Ella, que no tendría que estar haciéndose mala sangre por todo esto. Hay gente que le gusta laburar en este país y hay gente que no», finalizó.
Por otro lado, disparó contra el Gobierno: «Hay un montón de productos como el cacao o insumos que no podemos entrar a la fábrica porque no entran al país. Y eso es culpa de este gobierno», expresó.
«Es una empresa que tiene más de 100 años. Mi padre y mi abuelo invirtieron en este país. No hicieron como muchos que se fueron con la plata a otros lugares», dijo.
Fuente: La Razòn