En medio de los festejos por el centenario, venció a Rafaela 2-1; los santafecinos quedaron complicados con el promedio
Los partidos duran 90 minutos, pero All Boys sólo necesitó 90 segundos para sentirse feliz. En ese lapso, en el primer tiempo, metió dos goles y liquidó el partido contra Atlético de Rafaela. Eso solo. Nada más. Y alcanzó para que el conjunto de Floresta completara una noche casi ideal, en la que hasta se vistió de gala, con una camiseta con números dorados como parte de la celebración por los 100 años del club. Los festejos del aniversario fueron el elemento distintivo para que la noche sea inolvidable para muchos, aunque también podrán recodarla por el susto que pasaron en el final cuando los santafecinos merecieron llegar al empate.
En ese minuto y medio, entre los 37 y los 38m30s se resumió casi todo lo importante que pasó en el primer tiempo. Porque el partido había sido hasta allí un transitar lento y tedioso de 22 hombres que no acertaron combinación coherente con la pelota. Mucho pelotazo sin sentido y la presión para no dejar jugar al otro utilizada con un fanatismo rutinario y de hastío.
Por suerte en el fútbol hay sorpresas cada tanto. Y anoche hubo una de esas que hacen que uno no se sienta arrepentido por el espectáculo que eligió. Fue una ráfaga. Primero un impecable cabezazo de Vildozo -luego de un córner de Fredrich- y un ratito después una lucida definición colocada de Borghello tras pase de Soto.
¿Qué había hecho All Boys para merecer esa diferencia? Casi nada. Aunque en noches como estas, no hay que menospreciar la eficacia. Y vaya si la tuvo el equipo de Pepe Romero. Apenas tuvo un par de oportunidades y las concretó.
Lo único para rescatar de los santafecinos, un minuto antes de irse al descanso, fue un ingreso en tropel y a borbollones en el área rival, que terminó con un tiro de Eduardo Domínguez en el travesaño y una posterior salvada prodigiosa de Cambiasso.
El comienzo de la segunda mitad, antes de llegar al minuto, tuvo otra jugada en la que todavía nadie se explica como Rafaela no llegó a convertir. Cambiasso, con el rostro, tapó un remate a quemarropa de Vera, y en el rebote, Depetris tiró la pelota afuera con el arco vacío.
Ese par de jugadas hacían que el equipo de Burruchaga fuera merecedor, al menos, del descuento. Y algo más. Porque empezó a desbordarlo por derecha y por izquierda, con Vera y con Depetris. Pero por sobre todas las cosas, a sentirse cómodo para desplazarse con la conducción de Grazzini, la figura del partido.
Algo de justicia comenzó a hacerse con el descuento por el penal que convirtió Juan Eluchans. Que, además, dejó un daño colateral para All Boys por la expulsión de Fernando Sánchez, que recibió doble amarilla por la mano en el área.
Rafaela llegó a este partido cargando cuatro fechas sin victorias en sus espaldas. Y los puntos que fue dejando en el camino en el arranque de este torneo Final lo fueron hundiendo poco a poco en un promedio del descenso que no deberá descuidar, porque ya lo tiene en la zona crítica.
Tal vez por eso salió a buscar con decisión y arrinconó al local contra el arco de Cambiasso. Hubo otro penal de Ferrari a Grazzini. Una infracción grosera que no dejó dudas para casi nadie, menos para Vigliano, que no sancionó la falta.
Rafaela pagó por su mezquindad del comienzo. All Boys se llevó un buen susto y un éxito que tal vez no merecía. Pero nadie recordará esto en unos años. Para la historia será la semana mágica del centenario.
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penales le cobraron a Rafaela. Dos en el 3-0 con Racing (Bovaglio y Grazzini), otro en el 1-1 con Boca (Eluchans), y el de anoche.
Una baja muy costosa: operan a Ahumada
Por una vieja lesión en la columna, Oscar Ahumada será operado hoy y la recuperación lo tendrá unos 40 días inactivo. Una baja importante para All Boys, que, además, en la próxima fecha ante Argentinos no podrá contar con Soto, que llegó a las cinco amonestaciones, y Fernándo Sánchez, expulsado anoche..
Fuente. La Naciòn