El caso de los fondos buitre contra la Argentina por la deuda que todavía queda en default tendrá otro capítulo hoy en Nueva York. Elliott Management y Aurelius Capital deben presentar los alegatos ante la Cámara de Apelaciones para sostener el reclamo de un único pago de 1.300 millones de dólares en efectivo. Los fondos habían obtenido una primera sentencia favorable a su pedido por parte del juez Thomas Griesa. Pero luego, la Corte de Apelaciones dejó sin efecto ese fallo hasta tanto resuelva la cuestión de fondo, que es la posible violación de la Argentina de la cláusula de “pari passu” (esto es, igual tratamiento para todos los acreedores).
La actuación por parte de los fondos buitre corresponde a un cronograma establecido por la Cámara, que se inició el 28 de diciembre cuando la Argentina fijó su posición y deslizó la posibilidad de reabrir el canje de deuda que había lanzado en 2005 y 2010 para debilitar el fallo de Griesa.
El próximo viernes 1 de febrero el Gobierno nacional tendrá la posibilidad de contestar los puntos planteados por los inversores y el 27 de febrero habrá una audiencia oral donde ambas partes formularán sus alegatos finales.
A partir de esa fecha la Cámara de Apelaciones se tomará un tiempo para dictar su sentencia definitiva sobre el litigio que hizo peligrar el normal pago de la deuda regularizada y hundió los títulos públicos.
La Argentina basará su estrategia en dejar abierta la posibilidad de permitirles a los inversores que no entraron en los canjes anteriores cambiar sus títulos, bajo condiciones similares.
En el alegato final de la Argentina quedará definitivamente planteada la posibilidad de que el país ofrezca una nueva reapertura del swap, para lo cual sería imprescindible una suspensión parcial de la denominada Ley Cerrojo.
Por imposición de esta última norma, ninguna operación posterior a los canjes ya realizados podía contener aspectos más beneficiosos que los que obtuvieron aquellos que sí aceptaron el trueque.
Fuente: iEco