Con Almeyda en la cuerda floja por el bajo rendimiento del equipo en el Torneo Inicial, los hinchas ya expresaron su deseo de que vuelva Ramón Díaz al club. Los dirigentes, en tanto, tienen en carpeta a Gallardo, Labruna y Troglio.
El partido con Racing puede ser definitivo para la continuidad de Matías Almeyda como entrenador de River Plate, la irregular campaña del equipo y bajo nivel de juego que mostró en las primeras fechas colmaron la paciencia de los hinchas y los dirigentes ya no piensan en sostenerlo.
Durante el partido con Vélez los simpatizantes «millonarios» expresaron su descontento y pidieron por la vuelta de Ramón Díaz. El riojano se encuentra sin dirigir y quiere volver a hacerlo lo más rápido posible.
Su relación con Passarella no sería un problema, por las ganas del entrenador de regresar a Núñez. Además, cuenta con el apoyo de gran parte de la comisión directiva y ya estaría pensando en sus colaboradores: Celso Ayala sería su ayudante y no Rambert.
Uno de los inconvenientes para su llegada es la presencia del médico Gustavo Ríos y del entrenador de la reserva Gustavo Zapata, con quienes el DT no mantiene el mejor trato y se debería llegar a un acuerdo.
Otro de los candidatos es Marcelo Gallardo, uno de los hijos pródigos del club, que en su debut como entrenador en Nacional de Montevideo consiguió el título. Y al presidente le gusta su estilo europeo.
Sin embargo el ex jugador se fue mal de la institución y en algún momento dijo que Passarella lo echó dos veces. Pero esas diferencias podrían ser tratadas en caso de que sea el elegido.
Otros que aparecen, aunque con menos chances, son también dos entrenadores ligados con el club: Pedro Troglio y Omar Labruna, aunque ambos se encuentran dirigiendo a otros equipos en este momento.
Troglio, actual DT de Gimnasia de La Plata en el Nacional B, fue buscado para dirigir a River cuando descendió pero no quiso romper un contrato que tenía en ese momento y no aceptó.
Es uno de los favoritos de Passarella y en caso de que lo llamen podría revaluar su posición de no finalizar abruptamente el vínculo con su actual club para pensar en una mudanza a Núñez.
Por último, Omar Labruna siempre aparece como una de las opciones cuando se habla de un nuevo entrenador para River. Los dirigentes pensaron en él para acompañar a Almeyda y con Passarella tiene una buena relación.
El principal inconveniente es económico, ya que seencuentra trabajando en Chile como entrenador de Colo-Colo y tiene una cláusula de rescisión muy costosa para los valores locales.
Fuente: Infobae