El hombre la golpeó salvajemente en la puerta de su trabajo. Por las heridas y golpes la mujer quedó internada. Hace unos meses había logrado una orden de restricción domiciliaria con el fin de protegerse.
Sus días eran una pesadilla. Los golpes, los tormentos y la violencia psicológica que ella y su familia soportaron durante años parecían nunca llegar a su fin. Finalmente, un día Flavia Pavón se atrevió a hacer la denuncia contra su marido, Roberto Beltrán.
Comenzó los trámites del divorcio e incluso hasta consiguió una orden de restricción domiciliaria con el fin de protegerse. Sin embargo, el miércoles pasado, la maestra de 28 años sufrió, en la puerta de la escuela en la que trabaja, una nueva y brutal golpiza por la que permanece internada.
Flavia vive en Albateiro al 4300, en el barrio Oro Verde, de la localidad de Virrey del Pino, en el partido de La Matanza. Allí conoció a Roberto, con quien vive desde hace una década.
Desde el inicio hubo maltratos que la intimidaron. El miércoles pasado, a la salida de la escuela Nº 67, Beltrán la interceptó y literalmente le disfiguró el rostro a golpes. Flavia debió ser internada en la Clínica Figueroa Paredes, de Laferrere. Anoche, los profesionales que la atienden evaluaban la posibilidad de externarla, debido a que, afortunadamente, se comprobó que no hay lesiones internas que revistan gravedad.
“El es un tipo muy violento, especialmente en los últimos tiempos… me pegaba a mí, a mi mamá y hasta llegó a atacar a los vecinos que trataron de protegernos. Mi mamá es una señora grande, que ahora tiene mucho miedo de lo que nos puede hacer, más que nada porque la familia de él vive a tres cuadras de mi casa”, dijo Flavia desde la cama de la clínica.
Ella sólo quiere regresar a su casa para reencontrarse con su pequeña hija Zaira, de tan sólo un año y medio. Luego de esta última agresión, Beltrán fue detenido de inmediato por efectivos policiales y actualmente se encuentra alojado en la comisaría 16, de La Matanza, a la espera de que la Justicia resuelva su situación. La causa está en manos de la Unidad Funcional De Instrucción Criminal y Correccional Nº 3, del Departamento Judicial de la Matanza, a cargo del Dr. Guillermo Bordenave.
Si bien la relación de la pareja siempre fue conflictiva, desde fines de abril, los ataques de Beltrán comenzaron a incrementarse en frecuencia y fiereza. Esto fue precisamente lo que motivó a Flavia a denunciarlo por primera vez y hasta pedirle el divorcio. A los pocos días, el hombre dejó la vivienda familiar aunque la amenazó en varias oportunidades.
Fuente: Online-911