Luciana Aymar recargó las pilas anímicas en un encuentro con sus padres antes del choque clave con Gran Bretaña. Sabe que tendrá la chance de festejar sus 35 años peleando este viernes por una medalla olímpica. Entiende que ya estar entre las cuatro mejores por cuarto Juego consecutivo pone a Las Leonas en otra dimensión. Se ilusiona cuando el técnico insiste que en la semifinal se va a cumplir eso de ser el Diego del 86. Se apura y sale de la Villa sólo para estar un rato con sus padres, los que la contuvieron siempre. “Es muy lindo estar otra vez en una semifinal olímpica. Empieza otro torneo y tenemos que jugar los dos partidos más importantes”. Habla, palpita, vive Londres 2012. Luciana Aymar, la capitana de las indestructibles Leonas.
-¿Estar entre las cuatro les saca una mochila importante? -A lo largo de tantos torneos ya me saqué mochilas de todos los tamaños y colores. Tuvimos un partido tenso, con muchos nervios. Y salimos adelante.
-El Chapa Retegui dice que con Gran Bretaña se verá la mejor versión de las Leonas.
-Ojalá, creo que mejoramos mucho en estos partidos, y en lo personal también. Tenemos más juego pero quizá debemos lograr más profundidad.
-¿Sentías la presión de tener que estar siempre en la elite? -Estoy acostumbrada a ir a los torneos y que estemos obligadas a llegar a la final. Socialmente te lo pide la gente, mediáticamente los periodistas y después está en nosotros. Estamos acostumbradas a llegar. Es siempre un desafío.
-¿Qué tenés que mejorar vos, que sos la número 1 del mundo? -Siempre se pueden mejorar cosas. Y si uno considera que no debe mejorar, se pone un techo. Y nunca fui así. Por como soy como deportista, seguramente le pasará a Manu o Messi, a lo que yo le apunto es a los detalles. Mi tema pasa más por estar tranquila, tal vez no tenga que mejorar cosas técnicas, es más lo anímico y mental, que lo física y técnico. Mejorar la potencia, lo aeróbico, la definición en la técnica… Lo mío pasa por estar relajada, tranquila, motivada…
-¿Te pasó no llegar así a algún Juego? -Sí, por eso lo digo, me ha pasado de llegar agotada. A Atenas llegué cansada. Somos un equipo que viaja mucho, a Australia por ejemplo.
Unas horas libres a la tarde para las Leonas y Lucha que las aprovecha para pasarla con René y Nilda, sus padres. “Mi familia es mi cable a Tierra… Yo siempre tuve la contención de ellos. Me formaron y me educaron para ser un tipo de persona. Luego, en el éxito, podés cambiar tu personalidad sin querer y yo siempre, volviendo a ellos, mantengo los pies sobre el suelo”.
-Tu hermana Cinthia jugó. ¿Tenés el estigma de los N° 1, de que el hermano fue mejor? -Yo hubiese deseado que llegara al seleccionado, que jugara conmigo… Jugué en España y en el Jockey con ella, era de Selección. Quizá no tuvo la constancia, la continuidad, la entrega o el esfuerzo… En ese aspecto somos distintas, pero tiene un talento increíble. Ahora me dice: “Si yo me hubiese entrenado o seguido tu camino, estaríamos jugando juntas ahora”.
-¿Cuánto puede pesar hoy la localía de Gran Bretaña? -No nos tiene que jugar en contra. Tenemos que estar tranquilas más allá de que escuchemos gritos o que nos cobren en contra. Será un partido con mucho contraataque. Ellas tienen jugadoras muy rápidas, pero nosotras cada vez estamos mejor. Estamos muy cerca de conseguir lo que vinimos a buscar.
Fuente: Olé