Obama acusa a Romney de querer subir los impuestos

AKRON, Ohio, EE.UU. (AP) — El presidente Barack Obama describió el miércoles a su contendiente republicano Mitt Romney como un defensor de los recortes fiscales para las personas más ricas de Estados Unidos, a expensas de los recortes de impuestos populares para la mayoría de la gente.

Romney «le está pidiendo a ustedes pagar más para que la gente como él pueda conseguir una gran reducción de impuestos», declaró Obama.

El presidente retomó el debate fiscal sobre la clase media en Ohio, con paradas de campaña en Mansfield, de preferencia republicana, y en el bastión demócrata de Akron. Ambas partes también lanzaron nuevos anuncios de televisión, lo que marca el inicio de un empuje con vistas a las convenciones nacionales de los dos partidos a finales de agosto y principios de septiembre.

En respuesta al argumento republicano de que las propuestas de Obama podrían perjudicar a las pequeñas empresas, el presidente acusó que la propuesta fiscal de Romney forzaría a muchas personas a renunciar a las populares deducciones fiscales por hipotecas, servicios de salud y matrícula universitaria.

Obama hizo referencia a un nuevo informe que concluye que el plan económico de Romney desplazaría la carga fiscal de los contribuyentes ricos a los contribuyentes pobres y de clase media.

«La gente que gana 3 millones de dólares o más al año tendría una reducción fiscal de un cuarto de millón de dólares», dijo Obama ante más de 2.000 seguidores en Mansfield. «Pero escuchen, se pone peor. Según el plan fiscal de mi oponente, ¿quiénes creen que deben saldar la cuenta por estos recortes fiscales de 250.000? Ustedes».

En referencia al estudio hecho por economistas en el Centro de Políticas Fiscales y el Instituto Brookings, Obama dijo a sus seguidores en ambas paradas de campaña que el plan de Romney podría repercutir en un incremento fiscal de más de 2.000 dólares al año para una familia promedio con hijos.

«Ohio, no necesitamos más reducciones fiscales para gente que ya le va bien», dijo.

El reporte dice que el plan de Romney para extender recortes fiscales de 2001-2003 y reducir la carga impositiva sobre ingresos a individuos y empresas, junto con otros cambios fiscales, resultaría en una pérdida de ingresos fiscales por 456.000 millones de dólares en 2015. Romney ha dicho que su plan sería compensado y que no incrementaría el déficit, pero no ha dicho cómo lo lograría.

El estudio no toma en cuenta ningún nuevo recorte en el gasto gubernamental para compensar el ingreso perdido, pero asume que los contribuyentes más acaudalados podrían perder exenciones fiscales primero, antes que los contribuyentes de ingresos medios.

Asimismo, debido a que las familias con niños reciben significativos exenciones fiscales, cualquier cambio que reduzca esas exenciones afectaría a esas familias más que a adultos sin hijos, concluía el estudio.

La campaña de Romney argumenta que el reporte es erróneo porque no incluye reducciones en el gasto y porque no considera totalmente el crecimiento económico potencial derivado de menores tasas de impuestos. El estudio, sin embargo, sí considera cierto beneficio económico por parte del plan de Romney y aun así concluye que, netamente, los contribuyentes que ganan más de 200.000 dólares podrían recibirían recortes fiscales, mientras que aquellos con menos ingresos tendrían, en cambio, incrementos fiscales.