Natalia estuvo internada 146 días en terapia intensiva, soportó 41 cirugías y logró, pese a todos los pronósticos, que no le amputaran sus piernas. Tras el calvario que vivió desde el 22 de febrero, ayer regresó a su casa
Pasaron casi cinco meses de la tragedia ferroviaria en la estación de Once, donde murieron 51 personas y más de 700 resultaron heridas, y una de las pasajeras de aquel convoy 3772 de la línea Sarmiento continuaba luchando por su vida. Ayer, finalmente recibió el alta.
Fue un largo camino el que tuvo que soportar con mucho esfuerzo Natalia Meza para sobrevivir, por un lado, al choque del tren y, por otro, para recuperarse y reponerse tras salir con vida de esa tragedia.
No fue fácil. Natalia permaneció 146 días internada en terapia intensiva, le realizaron 41 cirugías y logró, pese a todos los pronósticos, que no le amputaran sus piernas. Estuvo en estos meses bajo el cuidado de los especialistas del sanatorio Fitz Roy, en la Capital Federal.
“A todos: los médicos, las enfermeras, los anestesistas, todos ellos me salvaron, y ahora sólo quiero volver a casa”, dijo Natalia al salir de la clínica en una silla de ruedas pero desde la que pudo pararse para subir a la ambulancia, publica el diario Clarín.
“Lloro porque siento alegría y bronca a la vez. Lo que pasó fue ineficiencia pura. El Gobierno y la empresa fueron absolutamente negligentes”, opinó su papá Santiago.
La mañana del 22 de febrero, Natalia quedó atrapada entre los hierros retorcidos del primer vagón y así resistió más de tres horas. Alan Mesa, otro de los pasajeros del fatídico tren, la animaba para que no se resistiera y ahora Natalia, ya en su casa de Merlo, desea volver a reencontrarse con él.
Fuente: Diario Hoy