La inflación en mayo fue del 0,36%, prácticamente la mitad del 0,64% de abril e inferior al 0,47% del mismo mes del año pasado, informó el Gobierno. La desaceleración de los precios permitió que la tasa acumulada en los cinco primeros meses del año fuera del 2,24%, más de un punto por debajo del 3,71% del mismo período de 2011. Con menos inflación, Brasil tiene margen para desplegar una política monetaria más expansiva.
El alza del Indice Nacional de Precios al Consumidor de Brasil de mayo, que fue menor a la esperada, abre espacios para que el gobierno relaje su política monetaria, dijo el ministro de Hacienda, Guido Mantega.
«(El IPCA) nos da grados de libertad para tener una política monetaria más flexible», dijo Mantega al llegar al Ministerio de Hacienda.
La inflación de Brasil en mayo fue del 0,36%, prácticamente la mitad del 0,64% de abril e inferior al 0,47% del mismo mes del año pasado, informó hoy el Gobierno.
La desaceleración de los precios permitió que la tasa acumulada en los cinco primeros meses del año fuera del 2,24 por ciento, más de un punto porcentual por debajo del 3,71 por ciento del mismo período de 2011, según los datos divulgados por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).
De la misma forma, el índice interanual se redujo al 4,99 por ciento, casi un punto y medio menos que el 6,55 por ciento registrado entre junio de 2010 y mayo de 2011.
Según el IBGE, el índice interanual mantuvo en mayo la tendencia descendente que se inició en septiembre, cuando la tasa era del 7,31 por ciento.
Los datos son compatibles con la meta que se propuso el Gobierno de terminar el año con una inflación del 4,5 por ciento con un margen de tolerancia de dos puntos porcentuales, lo que permite que la tasa llegue a un máximo del 6,5 por ciento.
Mientras que el Banco Central proyecta para este año una inflación del 4,4 por ciento, los economistas de las instituciones financieras prevén que será del 5,15 por ciento.
La inflación de 2011 fue del 6,50 por ciento, la mayor desde 2004, cuando alcanzó el 7,60 por ciento.
El IBGE explicó que los precios del tabaco, que en abril subieron el 15,04 por ciento y fueron los grandes causantes de la subida de la inflación, como consecuencia de la política del Gobierno de reducir el número de personas fumadoras, sólo aumentaron un 4,64 por ciento en mayo.
Los factores que más presionaron la inflación el mes pasado fueron los salarios de los empleados domésticos, con una variación del 0,66 por ciento, el vestuario (0,89 por ciento) y las medicinas (0,98 por ciento).
La desaceleración de la inflación refuerza la política del Banco Central de reducir gradualmente las tasas de interés para incentivar la inversión y el crecimiento económico, que en el primer trimestre del año fue de sólo el 0,2 por ciento.
La autoridad monetaria redujo los tipos básicos el mes pasado hasta el 8,5 por ciento anual, el menor nivel registrado hasta hoy en el país.
Fuente: Americaeconomia.com y EFE