Teatro Gran Rex: una bomba, dos versiones


Oyarbide planteó que artefacto era «peligroso»; la Policía lo negó. Uribe confirmó que no suspenderá la conferencia.

Contradicciones en torno al frustrado atentado contra el expresidente colombiano Álvaro Uribe en el Teatro Gran Rex, ubicado en el corazón del microcentro porteño.

Mientras que el juez federal Norberto Oyarbide indicó que el artefacto explosivo que se encontró en el segundo piso del edificio podía “producir muerte” y un “daño enorme”, la versión de la Policía Federal planteó que se trató de una bomba de estruendo con la que se pretendía “generar conmoción”.

Así lo afirmó ayer, alrededor de las 20, el director de Comunicación de la fuerza, Néstor Rodríguez González, quien confirmó que el artefacto tenía «efecto mecánico rompedor de escasa importancia». «Tiene un poder de metralla, con alto poder de ruido», indicó y confirmó que la bomba estaba programada para estallar a las 16:20.

Más temprano, Oyarbide se había remontado en la historia y había comparado lo que podría haber pasado en el Gran Rex con lo ocurrido en la Puerta 12 de la cancha de River. “Yo no sé de aparatos, pero esto es un hecho muy grave que con la fortuna de Dios no tuvo consecuencias impredecibles», sostuvo.

SANTOS POR URIBE
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, aseguró por Twitter que su gobierno “está haciendo y hará lo que sea necesario para garantizar la seguridad del Presidente Uribe y su familia».

Además, el mandatario instruyó a la Policía Nacional para avanzar en las investigaciones sobre el asunto.

Uribe confirmó que dará la conferencia sobre liderazgo y que no suspenderá sus actividades por lo ocurrido. Matías Pérez, uno de los organizadores del evento que se desarrollará en el teatro, señaló que la seguridad y «todo está bajo control», según publicó el diario La Nación.