El ministro de Economía ratificó que nada cambiará en el Gobierno tras la muerte de Kirchner. Aseguró que el aumento de precios no afecta en la mayoría de la población, aunque reconoció que «puede impactar en la clase media-alta». Además, afirmó que no renegociarán la deuda con el Club de París «mientras esté el FMI metido en el medio».
Amado Boudou negó que fuera a renunciar como ministro de Economía y, como si ratificara que «nada cambiará» en el Gobierno tras la muerte de Néstor Kirchner, aseguró que la inflación que en septiembre para el Indec fue del 0,7% -y para los privados 1,5%-, «no es un tema» que los preocupe.
Afirmó que el alza de precios «no es un tema» en grandes proporciones de la población. Pero reconoció que «sin duda, en algún sector de la población, clase media-alta, puede tener algún impacto».
Las palabras de Boudou se producen luego de que el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, sostuviera que la inflación “es un tema menor” para la economía de los argentinos.
«Estamos trabajando para que haya más inversión, porque esa es la única solución», destacó el ministro de Economía para luego criticar las propuestas de algunos sectores de la oposición para revertir la problemática.
«Lo que estamos viendo como propuesta de otros lados es congelamiento, achicamiento, y los argentinos ya sabemos lo que pasa cuando viene la propuesta del ajuste», replicó.
Club de París
Por otro lado, habló de las deudas que Argentina aún tiene en default con el Club de París.
«Estas son deudas contraídas con anterioridad y que entraron en cesación de pago por el desastre y el desmanejo de la Alianza y porque (el ex presidente, Adolfo) Rodríguez Saá instaló el default en la Argentina», culpó a las gestiones pasadas y explicó: «Es uno de los temas que queremos solucionar, pero nunca lo vamos a hacer con el Fondo Monetario en el medio, ni en términos que no sean los adecuados para la República Argentina».
La deuda que la Argentina mantiene con ese organismo multilateral de crédito -y que es la última que le queda por resolver para salir definitivamente del default- ronda los 6.700 millones de dólares.
Fuente: lapoliticaonline