Aumentan observadores del alto al fuego en Siria

Naciones Unidas- El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó ayer por unanimidad una resolución que amplía el número de observadores del organismo en Siria, de 30 a 300, y que exige un alto inmediato a la violencia que se ha intensificado desde hace una semana, cuando entró en vigor una tregua.

La resolución confiere al secretario general de ONU, Ban Ki-moon, la autoridad para decidir cuándo desplegar a los observadores internacionales, con base en los hechos que ocurran en Siria, incluida la «consolidación del cese al fuego».

Ban acusó el jueves al presidente sirio Bashar Assad de no cumplir con el alto al fuego, y se mostró consternado por la intensificación de la violencia.

En una declaración de su vocero, hecha ayer, en la que elogió la resolución, el secretario general exigió nuevamente que Siria ponga fin a toda violencia y «las groseras violaciones de los derechos fundamentales del pueblo sirio», devolviendo las fuerzas armadas y sus armas a los cuarteles.

La resolución crea una Misión de Supervisión de Naciones Unidas en Siria, que será conocida como Unsmis por sus iniciales en inglés, «comprendiendo un despliegue inicial de hasta 300 observadores militares desarmados, así como un componente civil apropiado» por un período inicial de 90 días que supervise el cese de la violencia y la aplicación del plan de paz de seis puntos elaborado por el enviado internacional Kofi Annan.

La resolución concilió declaraciones contradictorias de Rusia y Europa, y retiró la exigencia de sanciones no militares si Siria no retiraba sus fuerzas y armamento pesado de las ciudades y pueblos.

En lugar de ello, utiliza la redacción de la resolución adoptada hace una semana, autorizando el despliegue de un equipo de observadores de avanzada de 30 miembros. Ello expresaría la intención del consejo de evaluar cómo se implementa la nueva resolución y de «considerar más medidas».

Vitaly Churkin, embajador de Rusia ante la ONU, quien presionó por la aprobación rápida del documento, dijo al consejo después de la votación de ayer que la resolución es «de importancia fundamental para impulsar más el proceso de paz en Siria» y apoyar el plan de Annan. Fuentes diplomáticas dijeron que Annan, enviado de la ONU y la Liga Árabe, prevé informar al consejo el martes.

Rusia y China, que vetaron dos resoluciones anteriores, se oponen enérgicamente a las sanciones, y Churkin advirtió que no debe haber «desviaciones» del nuevo texto. Enfatizó que «el modelo libio», en el cual el consejo autorizó medidas militares para proteger a los civiles durante la insurrección del año pasado, «es algo que siempre debe quedar en el pasado».

Pero la embajadora estadounidense Susan Rice, en el discurso más enérgico de la reunión, advirtió a Assad que si Siria no cumple todos sus compromisos o si obstruye la tarea de los supervisores, Washington buscará otras «medidas».

Las tropas del régimen sirio dejaron ayer de bombardear la ciudad de Homs ante la visita de los observadores de la ONU, que se reunieron con las autoridades de la zona, según fuentes oficiales y de la oposición.

El gobernador de Homs habría alertado de la escalada de acciones de grupos terroristas en el país aprovechando el alto al fuego.
Por su parte, defensores de derechos humanos apuntaron que la tranquilidad reina desde ayer tras los intensos bombardeos de los últimos días.
EFE