Una manifestación israelí contra la “islamización” al norte del país desató una reacción de los árabes del lugar. El violento enfrentamiento terminó cuando la policía reprimió a los segundos con gases lacrimógenos y bombas de aturdimiento.
Una manifestación de árabes que se había congregado en la misma ciudad donde judíos ultranacionalistas protestaban contra los musulmanes, terminó con serios enfrentamientos y la policía israelí reprimiendo a los primeros con granadas aturdidoras y gases lacrimógenos.
Los ultranacionalistas llegaron por la mañana a Umm al Fahm, en el norte del país, para conmemorar los 20 años de la muerte del activista Meir Kahane y protestar contra la «islamización» de la sociedad israelí.
El reclamo puntual es contra el Movimiento Islámico, que tiene su sede en esta ciudad cercana a Haifa y cuyo líder, Sheij Raed Salah, afirma que Israel pone en peligro los lugares sagrados de los musulmanes en Jerusalén.
Se recordó a Kahane, el líder asesinado a manos de un egipcio tras una conferencia en Nueva York y fundador del partido Kach, ilegalizado en los años 80 por «antidemocrático y racista».
El Kach promovía la segregación de los árabes israelíes así como las expulsiones de sus casas y la anexión de Gaza y Cisjordania.
Durante la marcha hubo pancartas y eslóganes que conmemoraban su asesinato, lo que generó la reacción de los árabes que comenzaron a arrojar piedras, informó la agencia de noticias DPA.
La reacción no se hizo esperar y el intercambio de violencia finalizó con la intervención de la policía, que debió utilizar gas lacrimógeno y bombas de aturdimiento, según informó la agencia de noticias Europa Press.
El diario israelí Haaretz, en su edición digital, añade que hay varios detenidos pero ningún herido grave.
Uhm el Fahm es una localidad de 44.000 habitantes situada en el norte de Israel y núcleo de la rama norte del Movimiento Islámico.
Entre los activistas de extrema derecha que viajaron a esa localidad se encuentran el líder colono de ultraderecha Baruch Marcel y el diputado de Unión Nacional, Michael Ben-Ari, quien lanzó un mensaje al gobierno afirmando que «no existen razones para que el Movimiento Islámico exista en Israel».
Por su parte, el activista ultranacionalista Itamar Ben-Gvir, también manifestó sus quejas.
«No entiendo por qué cuando Peace Now (ONG pacifista israelí) viene a manifestarse ante mi casa en Hebrón es por la gloria de la libertad de expresión y cuando queremos ejercer nuestro legítimo derecho entonces es una provocación», afirmó Ben-Gvir.
«Vamos a enseñar a la izquierda lo que es la democracia y pediremos que se prohíba el Movimiento Islámico», advirtió en tono profético.
Fuente: 26noticias