CARTA ABIERTA A LA PRESIDENTA CRISTINA KIRCHNER
Los primeros en respetar las instituciones deben ser quienes las detentan
Señora Presidenta; Con todo respeto, en esta carta voy a señalar hechos que tienen que ver con Ud. y después le voy a contar de mi.
No voy a expresar conclusiones, simplemente voy a señalar solo algunos hechos que han sucedido durante el mandato de su marido y los suyos. La valija de los dólares, los cheques de la efedrina, el dinero en el baño de la ministra, el negociado de Skanska, las coimas de la exportación a Venezuela, Schoklender y las Madres, Ciccone Cartográfica, la remoción de Garrido cuando investigaba el enriquecimiento ilícito de Ud. y su Marido, la inocencia de Menem, los sorteos de Oyarbide, la orden dada por Ud. y su esposo al director del estado en YPF, para que se repartieran utilidades y Eskenazi pudiera, sin poner un peso, hacerse del 20% de la empresa… Le cuento de mi vida.
Tengo 67 años y he nacido aquí, he estudiado aquí, soy Ingeniera Industrial, hemos tenido con mi esposa seis hijos, todos son profesionales menos la menor que es down y trabaja. He vivido toda mi vida de mi trabajo, disculpe este abuso de presentación, me pareció importante para que Ud. conozca a su interlocutor.
Después de escuchar la exposición del Vicepresidente en ejercicio no salgo de mi asombro, tanto por lo expresado, como por los sucesos que siguieron en el ámbito oficial a tal despropósito. Lejos de allanarse a la justicia para aclarar esta dudosísima situación, la atacó sin reparos haciendo gala de un poder que me asusta porque desconoce la existencia de las instituciones y la independencia de los poderes, siendo el Vicepresidente en ejercicio, cuando Ud. remueve de hecho al Procurador General y lo reemplaza por un soldado casi raso pero muy obediente.
Usted avala aquella actitud por lo que la comparte y yo como ciudadano debo entonces asociarla sin atenuantes a la impunidad de los hechos arriba descriptos. Denos una esperanza, suspenda a Budou y sométalo a la justicia. Separe ya a Oyarbide que es la vergüenza nacional. Simplemente, en esta materia, mírese en Brasil, 7 funcionarios juzgados por corrupción por orden presidencial.
No me haga pensar que tiene miedo de abrir las puertas del infierno y que se los trague a todos. Que cree Señora Presidente, Señor Vicepresidente, Senador Anibal Fernandez, Ex Procurador Righi incluido (El fue el verdugo de Garrido) y sigue la lista; que tienen derecho a pisotear impunemente las INSTIUCIONES y mentirnos a cada paso sin pudor, con el solo horizonte de asirse del poder cada día mas y enriquecerse en base a negociados espurios.
Señora Presidente, le pido respeto por mi vida, por mi trabajo y por mis hijos, esto son en esencia las INSTITUCIONES que sustentan una sociedad en paz. Note que desde el momento en que la justicia desaparece como poder independiente, mi destino es suyo con lo que me ha transformado en un esclavo cívico y creo que no hay guarismos electorales que convaliden esta situación en democracia. Recuerde alguna vez que la mayoría tiene normalmente la decisión, pero no necesariamente la razón.
Con todo respeto Yo Señora ya no creo en Ud. ni en la gente que la rodea. Piense si puedo creer. Dígame sino que funcionario relacionado a los casos descriptos está preso. Por todos, respete la independencia del poder judicial, déjelo trabajar y si alguna vez en un examen de conciencia decide cambiar, no permita que los corruptos como hasta ahora, estén dentro de sus equipos y en sus salones, que sea el pueblo el que la aplauda o la critique.
Con dolor ciudadano Señora, Ud. mato mis esperanzas. Y ya no puedo tragar más, mi dignidad cívica no me lo permite. Respétenos, esto es demasiado aquí y en cualquier sociedad del mundo. Señora, yo soy millones y estamos esperando el milagro.
Fernando de San Román
Fuente: El Intransigente