La Presidenta cuestionó a los manifestantes que privilegiaron la resolución del conflicto laboral sobre su declaración ante la Justicia. «No se puede creer», escribió en Twitter al comentar las afirmaciones de la fiscal Cristina Caamaño, quien se había quejado porque no le entregaron videos ni fotos. Un delegado sindical aseguró saber quien fue el asesino pero se negó a brindar testimonio hasta que se resuelva su situación laboral. La Justicia apartó a la Policía Federal de la investigación.
Vía Twitter, la Presidenta se hizo eco de las quejas de la fiscal de la causa, Cristina Caamaño, por las «condiciones» impuestas por los compañeros de militancia de Ferreyra para dar testimonio.
«Acabo de leer en diario Popular declaraciones de la fiscal en la causa de Mariano Ferreyra. «Están utilizando la muerte de Mariano para que los reincorporen»», reprodujo la jefa del Estado a través de la red social. Enseguida, añadió: «Se refiere a la negativa de compañeros del joven asesinado de presentarse a declarar y demorar la entrega de videos y fotos».
La Presidenta ahondó en los dichos de la fiscal: «Contó que unos privilegiaron la asistencia a la marcha y otros las entrevistas con autoridades para que los cesanteados fueran reincorporados». En otro post, “También Tiempo Argentino «No usen la muerte de Mariano» pidió la Fiscal Cristina Caamaño. Confirmó las exigencias”.
Finalmente, Cristina Kirchner concluyó: «NO SE PUEDE CREER, así, en mayúsculas.
En la misma línea, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, acusó a los trabajadores de las empresas tercerizadas de la línea Roca de «utilizar irresponsablemente» el asesinato de Mariano Ferreyra. «Ellos no pueden utilizar irresponsablemente esto: dijeron que no iban a hacer declaraciones ante la fiscal antes de que se dirima este tema (laboral)», se quejó el ministro.
El delegado que dice conocer al asesino y no declara
Tal como ayer anticipó LPO, Diego Cardía, un representante de los trabajadores tercerizados, aseguró que el asesino de Mariano Ferreyra «es encargado» de los talleres de Remedios de Escalada. Sin embargo, se negó a brindar ese mismo testimonio ante la Justicia hasta que se resuelva su situación laboral.
«Yo le dije a la fiscal que no iba a declarar hasta que el ministro de Trabajo firme la reincorporación a la ex línea Roca y hasta que el Gobierno nos reciba para una reunión», admitió el trabajador ferroviario en declaraciones radiales.
Ante esta situación, la fiscal del caso, Cristina Caamaño, indicó que al menos dos de los testigos «están usando la muerte de Mariano Ferreyra». De ese modo aludió a Cardía y a Nelson Aguirre, quienes realizaron declaraciones ante los medios pero se negaron a colaborar con la investigación.
«Están usando la muerte de Mariano para que los reincorporen. A mí no me interesa si se reúnen con la Presidente o no. Yo necesito que vengan y que me digan las cosas que están diciendo en los medios», reclamó Caamaño.
Y prosiguió: «Cardía habla con los medios y conmigo no. Lo mismo me pasó con Nelson Aguirre. Yo estuve ayer con él en el hospital y me dijo que no quería hablar. Le dejé mi tarjeta. Hoy le dan el alta y sale diciendo que vio a quién disparó».
La Justicia apartó a la policía
Ante las denuncias de la supuesta colaboración de policías con el grupo que mató a Ferreyra, la Justicia le quitó ayer a la Policía Federal el sumario en el que se investiga el ataque.
Varios de los sindicalistas que formaban parte del grupo de la Unión Ferroviaria (UF), que agredió a los manifestantes del PO y los trabajadores tercerizados del ex Ferrocarril Roca fueron identificados. Pero todavía no hay detenidos por el homicidio de Ferreyra ni por el ataque que dejó en estado de coma a Elsa Rodríguez, de 56 años.
De las imágenes aportadas por el canal de televisión C5N se pudo identificar a por lo menos seis sindicalistas que formaban parte del grupo agresor, que pertenecen a la UF y que trabajan en los talleres del ferrocarril en Remedios de Escalada.
Según trascendió, por lo menos tres de ellos estarían vinculados con las barras bravas de Independiente y de Banfield, y uno de ellos, que en las imágenes aparecería con un cuello ortopédico, había dado parte de enfermo en el taller de Remedios de Escalada.
Fuente: lapoliticaonline.com