Rusia y Turquía se oponen a intervención militar en Siria

La comunidad internacional tiene que apoyar las conversaciones de reconciliación entre el gobierno del presidente Bashar al Assad y la oposición siria, dijo Lavrov, que ofreció Rusia como escenario de las conversaciones en las que no debe haber precondiciones como la dimisión de Al Assad, dijo.

Moscú/El Cairo. – Rusia y Turquía manifestaron hoy su oposición a una intervención militar en Siria y consideraron que el diálogo es el único medio de poner fin a la violencia en el país, señaló hoy el ministro del Exterior ruso, Serguei Lavrov, en una rueda de prensa en Moscú con su homólogo turco Ahmet Davutoglu.

«Nuestra postura básica hacia Siria me parece que coincide», dijo Lavrov citado por la agencia de noticias Interfax. «Los dos nos oponemos a cualquier tipo de injerencia militar del exterior», informó DPA.

La comunidad internacional tiene que apoyar las conversaciones de reconciliación entre el gobierno del presidente Bashar al Assad y la oposición siria, dijo Lavrov, que ofreció Rusia como escenario de las conversaciones en las que no debe haber precondiciones como la dimisión de Al Assad, dijo. Sino en Moscú, el diálogo podría tener lugar en Damsco, El Cairo o Turquía, añadió.

Los líderes de la oposición señalaron que la destitución de Al Assad es una prioridad.

Sin embargo, Rusia no apoyará sanciones «unilaterales» de ningún grupo de naciones contra el régimen sirio, dijo Al Assad. El gobierno ruso reiteró que de ser necesario, Rusia vetaría cualquier resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que pudiera autorizar el uso de la fuerza.

Mientras, los Estados árabes exigieron al Consejo de Seguridad de la ONU que apoye el plan para el cambio de poder en Siria, dijo el ministro del Exterior de Qatar, Sheij Hamad bin Yasim al Thani, en una entrevista en la noche del martes con el canal Al Yazira. Según dijo, aparte de Siria sólo hay un país de la organización que no apoyaría ese procedimiento, al parecer Líbano.

La Liga Árabe propuso el fin de semana la formación de un gobierno de unidad nacional y la dimisión de Al Assad como bases de una transición pacífica en el país, un plan rechazado tanto por el gobierno como por la oposición sirias.

En la noche del martes, Assad aceptó sin embargo la prolongación de la misión de observadores de la Liga Árabe aprobada el fin de semana, de la que sin embargo se retiraron los países del Golfo, al considerar que fracasó a la hora de poner fin a la violencia.

La agencia de noticias sirias Sana informó hoy citando fuentes anónimas que los Estados del Golfo tomaron una decisión con el gobierno estadounidense a coste de Siria: acordaron que el Consejo de Seguridad actúe contra Damasco a cambio de que Estados Unidos no apoye posibles movimientos de protesta en sus países, señaló la agencia.

Desde marzo murieron más de 5.600 personas en Siria, según datos de la ONU, en la represión violenta de las protestas contra el régimen. El martes murieron 67 personas, según los activistas de la oposición.

Fuente: El Universal