Mancini: «El Gobierno no quiere que le digan lo que no quiere escuchar»

BUENOS AIRES.- El duro discurso que Hugo Moyano dio el jueves en la cancha de Huracán, terminó de confirmar una situación de alejamiento entre el gobierno y los sectores sindicales que históricamente acompañaron al kirchnerismo. Directo, explícito y muy crítico del gobierno nacional, el Secretario General de la CGT abrió un nuevo panorama político a menos de una semana de haber asumido Cristina Fernández de Kirchner. Jorge Mancini es Diputado Provincial por Buenos Aires, integrante de la CGT y hombre muy cercano a Moyano. Luego del acto, habló en exclusiva con y reafirmó las críticas del líder camionero.

: ¿Cómo se puede analizar el duro discurso de Moyano del pasado jueves en estadio de Huracán?

Jorge Mancini: “Creo que tenemos que ser muy cautelosos, fue un discurso muy duro. Hay un distanciamiento, no provocado por el movimiento obrero, sino por el discurso de la Presidenta y por el ataque sistemático que se lleva adelante contra el Movimiento Obrero, que no se acerca o se aleja a los gobiernos. Son los gobiernos los que se alejan o se acercan de acuerdo con las políticas concretas que llevan a cabo respecto de los derechos de los trabajadores. Si acercan políticas coherentes que beneficien a los trabajadores, nosotros vamos a acompañar. Ahora, si se alejan de eso –como ha pasado en la década del noventa- nos vamos a poner de la vereda de enfrente. Nosotros defendemos los intereses de los trabajadores”.

E.I: ¿Por qué cree que el gobierno está experimentando este cambio de dirección?

J.M: “Creo que el gobierno tiene que hacer acuerdos con otros sectores. Pero el movimiento obrero sólo tiene que hacer acuerdo con los trabajadores. El gobierno nacional está buscando la confrontación porque es probable que tenga que lograr acuerdos con sectores empresariales. Nosotros nunca cambiamos de opinión. Con respecto al tema de participación en las ganancias de los trabajadores en las empresas, dos años atrás el gobierno apoyaba la iniciativa, y hoy ya no la apoya. Con respecto al aumento del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, todavía estamos esperando una respuesta del gobierno. Creo que cambia de posición el gobierno porque no le gusta que le digan lo que no quiere escuchar”.

E.I: ¿El diálogo con la Presidenta está roto?

J.M: “Tampoco hay que tomar esto como una guerra. Nosotros planteamos nuestra posición, porque el conflicto empezó cuando fue atacado sistemáticamente el Movimiento Obrero, y ese ataque de la Presidenta terminó de unificarnos, cosa que nos viene muy bien. El movimiento unido, jamás será vencido”.

E.I: ¿Está oficializada esa unificación?

J.M: “Barrionuevo dijo el jueves que con la actitud de Moyano ya tenía elegido a su Secretario General de la CGT. La misma actitud tuvo el Momo Venegas, que habían estado políticamente distanciados. Hoy están sindicalmente acompañando lo que plantea Moyano, y no tengo ninguna duda que se va a llegar a la unificación del movimiento”.

E.I: Entre el conflicto en Aerolíneas Argentinas y los enfrentamientos en la legislatura provincial, ¿es el síntoma de la pelea entre la CGT y La Cámpora?

J.M: “Nosotros no estamos disputando nada con La Cámpora. Es una agrupación como lo fue el Grupo Sushi o la Coordinadora del radicalismo. Pero están ocupando espacios que deberían haber sido para los movimientos sociales, que también fueron los que salieron a la calle a defender el modelo en los momentos más críticos del gobierno. Pero la discusión tampoco pasa todo por ahí, pasa por un tema de soberbia. Cuando hace dos años asumí como diputado provincial, me dijeron que tenía que aprender y pagar el derecho de piso. Pero los muchachos de La Cámpora vienen con una soberbia incomprensible, impulsada desde el gobierno nacional. No está bien que en un poder independiente como el legislativo, sea el ejecutivo el que elija las autoridades de la Cámara. Pero si en la Cámara de Diputados sólo estamos para aprobar lo que viene del ejecutivo, entonces deberían cerrar el Congreso”.

Fuente: Por Guido para El Intransigente