Los empleados de la Caja Complementaria Docente, entidad que nuclea a maestros jubilados de todo el país, entraron hoy en «alerta y movilización» en reclamo de mejoras salariales, pago de aguinaldo en término y «transparencia en los nombramientos de planta permanente y contratados».
La liquidación de los haberes complementarios de los jubilados nacionales se realiza desde la sede central situada en Alsina 875 de la Capital Federal y de concretarse las medidas de fuerza peligraría el cobro del plus jubilatorio para más de 75.000 beneficiarios, según señalaron trabajadores del sector.
La Caja Complementaria Docente está dirigida por representantes gremiales de todos los sindicatos docentes (CTERA, UDA, AMET Y SADOP) y representantes del Ministerio de Educación de la Nación.
Las medidas de fuerza fueron resueltas en la tarde de hoy en una asamblea que se realizó en la sede sindical como «reacción a la decisión del Consejo de Administración de demorar el pago de los aguinaldos en repudio a la denuncia que los trabajadores hicieron pública respecto de la existencia de ´ñoquis´ en puestos jerárquicos», según se indicó.
Los supuestos «ñoquis» cobrarían, según el dirigente sindical Guillermo Soria, sumas que rondarían los 15.000 pesos mensuales.
Soria dijo en la reunión asamblearia que «mientras todo el personal cobra un promedio de 4.500 pesos mensuales, más de un grupo de privilegiados sólo viene a cobrar sueldos que rondan los 20.000 pesos con cargas sociales incluídas».
La asamblea resolvió que en caso de no recibir respuestas dentro de los próximas 48 horas iniciarán «trabajo a reglamento y huelga de brazos caídos para luego marchar al Ministerio de Trabajo y al Ministerio de Educación en reclamo del reemplazo de los funcionarios estatales que deben velar por la transparencia y están mirando para otro lado, esquivando responsabilidades por razones que no se alcanzan a comprender».