El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, confía en poder cederle la posta a una persona de confianza como Beatriz Paglieri en el cargo que lo lanzó al estrellato, antes de cambiar de funciones para el segundo mandato de la presidenta Cristina Kirchner.
Conocido a lo largo y ancho del país por su rol de celador de precios y sus cuestionados métodos para mantener con la rienda corta a los empresarios, Moreno ya le ha dado su bendición a Paglieri en caso de que la jefa de Estado resuelva que sea ella la encargada de continuar con su obra.
Se dice que Paglieri, mano derecha de Moreno en el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), figuraría incluso en una terna junto con otros dos hombres de confianza del secretario de Comercio Interior, Pablo Cerioli y Carlos Cancelli, aunque las especulaciones aún están en pañales.
Lo cierto es que Moreno abandonará su cargo a fines de año y si bien había amagado con retirarse de la política activa, una charla con Cristina generó que el polémico funcionario cambiara su discurso, dejara de mencionar la palabra «adiós» (a las armas) y comenzara a hablar sólo de un cambio de funciones.
En este contexto, empezaron a surgir múltiples versiones en las últimas horas sobre cuál podría ser el destino de Moreno en el próximo gabinete de Cristina y hasta se llegó a mencionar la posibilidad de que asuma como nuevo titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Moreno prefiere un cargo que le permita adoptar un perfil más bajo después de varios años de una excesiva exposición mediática como soldado de trinchera del proyecto nacional y popular liderado primero por Néstor Kirchner y ahora por Cristina, que iniciará el 10 de diciembre su segundo mandato.
Un puesto en algún banco de desarrollo o en todo caso en el Banco Nación figuraba en los planes de Moreno, aunque parece que la jefa de Estado decidió otorgarle un nuevo «papel protagónico» en el libreto 2011-2015 que tiene en mente.
Mientras tanto, el funcionario, que en los últimos días se mostró más interesado en poder garantizar las medidas oficiales para mantener frenado al dólar que controlar los precios, busca entregarle la posta a una persona de su «riñón» para que siga adelante con su tarea en la Secretaría.
Y lógicamente, si la Presidenta le pide una recomendación, Moreno ya tendría un nombre fijo e inamovible al tope de su lista de candidatos, su lugarteniente en el INDEC y la persona a la que el Estado le cedió su representación en Papel Prensa, en medio del conflicto en esa empresa: Paglieri.
NA