Un adolescente de 13 años baleó a un policía retirado en un intento de robo

Ocurrió en La Plata. El ex policía recibió un disparo en una mano cuando intentó frustrar un asalto en una ferretería. Los autores fueron demorados poco después del hecho.

Un policía retirado fue baleado en una mano al frustrar un intento de asalto a una ferretería de un barrio platense, protagonizado por dos jóvenes, uno de ellos de apenas 13 años, que poco después fueron demorados.

El policía resultó herido al trabarse en lucha con los dos asaltantes y mientras intentaba desarmarlos, en la puerta del negocio, ubicado en la zona de Villa Elvira.

La víctima de este episodio fue identificada como Carlos Fontova, de 59 años, quien además se desempeña como plomero y habitualmente concurre al negocio donde ayer se produjo el intento de asalto.

Todo se inició dentro del comercio que funciona en la esquina de las calles 11 y 72, al cual el policía retirado -que vive a sólo dos cuadras de alli- había concurrido para realizar una compra, como acostumbra a hacerlo, según lo señalado por el diario El Día de esta ciudad.

De pronto, dos delincuentes entraron dispuestos a todo: uno de ellos, blandiendo un arma de fuego y, a los gritos, exigió a la dueña del local la entrega del dinero de la recaudación, según lo señalado.

Fontova se abalanzó sobre ambos asaltantes y envolviéndolos con sus brazos logró sacarlos a la vereda. Allí, el policía retirado se trenzó en lucha con quien tenía el arma de fuego.

En esas circunstancias, presumiblemente por haber gatillado el ladrón, el policía retirado recibió un balazo en la palma de una de sus manos.

Luego de efectuado el disparo, los delincuentes, de 13 y 18 años, se dieron rápidamente a la fuga en una moto.

Pero poco después, tras ser perseguidos por efectivos policiales de la comisaría 8va, bajo directivas del comisario Alfredo Sanguinetti, fueron aprehendidos en la esquina de las calles 124 y 96.

Enseguida, tanto los dueños del comercio, como otras personas del lugar, dieron aviso a una ambulancia y al 911.

Leonardo Princi, propietario del local, señaló al diario El Día: «Enseguida fuimos a pedirle a un vecino que lo lleve a Carlitos en su auto particular. Pero justo llegó un patrullero y los policías lo subieron al móvil y lo trasladaron al hospital San Martín».

«Pensar que vino a comprar un flexible, porque ahora trabaja como plomero y es cliente nuestro. Inclusive tiene su casa a dos cuadras de acá. Cuando escuchó a los dos delincuentes que venían a robar, se dio vuelta, los abrazó hasta sacarlos a la calle y mientras forcejeaban recibió el tiro en la mano, al parecer, porque le dispararon. Creo que no fue algo accidental», señaló.

Fuente: Online-911