Rechazo unánime en Uruguay a acusación de ser paraíso fiscal de Sarkozy

La inclusión que hizo el presidente francés Nicolás Sarkozy a Uruguay dentro de una lista de paraísos fiscales generó una ola de críticas que unió al gobierno de Montevideo y a los partidos opositores.
Como primera reacción oficial, la cancillería uruguaya pidió explicaciones al embajador francés en Montevideo, quien dijo no conocer las declaraciones de Sarkozy, quien las formuló el viernes tras la cumbre del G20 en Cannes.

A juicio del presidente José Mujica, las palabras del mandatario de Francia «son una barbaridad».

«Nos parece una generalización y establecemos nuestra protesta», respondió lacónicamente Mujica el viernes por la noche en declaraciones a la televisión local.

Uruguay «tiene un acuerdo de cooperación en materia de intercambio de información financiera con Francia; no sé si el presidente Sarkozy estará enterado de eso», se preguntó.

Sarkozy fustigó a los estados señalados por la OCDE como «paraísos fiscales» los cuales no cooperan al ofrecer información tributaria y entre ellos mencionó a Uruguay.

«No queremos paraísos fiscales. El mensaje es claro, los países que siguen siendo paraísos fiscales con la ocultación financiera serán apartados de la comunidad internacional», agregó el canciller.

En su opinión, «Antigua y Barbuda, Barbados, Botsuana, Brunei, Panamá, Seychelles, Trinidad y Tobago, Uruguay y Vanatou no tienen un marco jurídico adaptado a los intercambios de información fiscal».

Para el vicepresidente y ex ministro de Economía Danilo Astori, los dichos de Sarkzoy son «lamentables» y transmiten un ánimo «típico de una mentalidad imperial o colonial».

El funcionario demostró también que «no conoce la realidad tributaria del Uruguay» donde todos los que generan ingresos «pagan impuestos e inclusive hay un impuesto a los no residentes».

«Lo que caracteriza a un paraíso fiscal es no tener impuesto para los no residentes. Uruguay lo tiene como parte de la reforma tributaria que se comenzó a realizar en el 2007», sentenció.

Sin embargo, el vicepresidente reconoció que Uruguay integra la «lista gris» de la OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económico) de «jurisdicciones que pese a no estar cumpliendo (con los estándares internacionales de cooperación)» se comprometen a hacerlo.

No obstante, consideró esa inclusión como «una injusticia para Uruguay porque jamás incurrió en conductas poco transparentes desde el punto de vista tributario, nunca ocultó información».

Por su parte, la oposición apoyó sin fisuras a Mujica.

En opinión del presidente del Partido Nacional (PN), Luis Alberto Heber, el mandatario francés exhibió «una actitud imperial».

«La reacción (uruguaya) tiene que ser muy dura porque el presidente Sarkozy está hablando sin ningún tipo de información que lo respalde», afirmó Heber.

En tanto, desde el también opositor Partido Colorado (PC), el ex presidente Julio María Sanguinetti (1985-1990, 1995-2000), sostuvo hoy que Sarkozy «evidentemente no está bien informado».

«Hablar de un paraíso fiscal en un país con la presión fiscal que tienen nuestros países es un acto de total desinformación», aseveró.

Asimismo, el presidente del Partido Independiente, Pablo Mieres, indicó que «estamos apoyando al gobierno porque hay que exigir una rectificación de las declaraciones de Sarkozy. Es un atrevimiento impertinente».

La noche del viernes, el encargado de negocios de Francia, Stephane Toulet, concurrió al Palacio Santos, sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay, a donde fue convocado por el canciller Luis Almagro.

Según Almagro, el diplomático europeo indicó que «no estaba al tanto» de las expresiones de su presidente y anunció que llevará la posición uruguaya a la cancillería de Francia. (Xinhua)