El testigo declaró que vio a la nena y su madre junto a Héctor Moreyra, el supuesto autor intelectual, y Hugo Bermúdez en una feria del barrio porteño de Villa Lugano poco antes de la desaparición de la nena.
Una testigo aseguró que vio a Candela Rodríguez y a su madre con los supuestos autores material e intelectual en una feria del barrio porteño de Villa Lugano poco antes de la desaparición de la niña, en agosto pasado, en la localidad bonaerense de Villa Tesei.
Según surge del pedido de prisión preventiva del fiscal Marcelo Tavolaro contra el presunto ideólogo del hecho, Héctor «Topo» Moreyra, la nena de 11 años y su madre, Carola Labrador, se saludaron «como muy amigos» con este imputado y con Hugo Bermúdez, sindicado como autor material del homicidio.
La mujer -cuya identidad esta agencia mantendrá en reserva- declaró en la causa que vende ropa usada en la feria situada en Larraya 4048 de Villa Lugano desde hace unos tres años.
«Refirió que en varias oportunidades, antes de la desaparición de Candela, vio a Hugo Bermúdez y a `El Topo` Moreyra, que hoy sabe que se llaman así, ya que vio sus fotografías por televisión, en dicha feria juntos», afirmó el fiscal en el escrito al que accedió Télam.
Al declarar en la causa por el asesinato de Candela, ambos dijeron no conocerse y por eso este testimonio es relevante para el fiscal, que ya encontró varios «dichos mendaces» de los imputados, dijeron fuentes judiciales.
La vendedora detalló que ambos se reunían en un local con fachada de locutorio situado en Larraya 4012, perteneciente a un hombre llamado Silvio, donde «se vende droga, documentos truchos y de todo», lo cual a ella le genera «mucho miedo».
Dijo que el sábado anterior a que Candela desapareciera, los vio a los dos en el lugar y que una semana después, mientras la nena estaba desaparecida, se encontraba en el baño de ese local y escuchó al tal Silvio decirle a un hombre morocho muy flaco, medio petiso y a su mujer: «Matala».
La vendedora declaró que «la mamá de Candela y Candela iban habitualmente ahí a comprar ropa y conocían a Silvio y a Nilda (mujer de éste último), y que incluso vio que saludaron a ese `Topo` y a ese Hugo y que se saludaban como muy amigos».
La mujer aclaró que ahora sabe que esa madre e hija son Carola y Candela porque vio sus rostros en la televisión y que también concurría al lugar la tía de la niña, a la que dijo haber visto fumando en la puerta «con ese Hugo adentro» del local.
La testigo también acotó que cuando Moreyra y Bermúdez estaban en ese local veía estacionados una camioneta Partner bordó y una Renault Trafic blanca (ambas secuestradas al presunto autor material) y un Suzuki negro, auto que algunos testigos señalan como el que se usó para «levantar» a la nena.
El fiscal Tavolaro solicitó para «El Topo» la prisión preventiva como presunto autor intelectual del crimen de Candela el martes pasado y el juez de Garantías Alfredo Meade tiene plazo para resolver si hace lugar al planteo hasta el lunes próximo.
Según la hipótesis del fiscal, el crimen de Candela fue «un ajuste de cuentas no convencional» contra el padre de la niña, Alfredo Rodríguez, quien se encuentra preso por piratería del asfalto.
Para Tavolaro, «El Topo» habría decidido vengarse de Rodríguez para hacer creer en el barrio que el padre de Candela era un «buchón» de la policía, cuando en realidad el verdadero informante era él.
Candela desapareció el 22 de agosto cuando salió de su casa de la localidad de Villa Tesei, partido de Hurlingham, y fue encontrada asesinada nueve días después, en un descampado ubicado cerca del Acceso Oeste.
Por el caso, además de Moreyra y Bermúdez, hay otros seis detenidos, cinco de los cuales ya están procesados con prisión preventiva.
Fuente: Online-911