Dos nenes asaltaron un local armados con cuchillos

Ocurrió a plena luz del día en una pollajería de 32 entre 139 y 140. Le dijeron que, si no les daba la plata, «la clavaban». Luego huyeron.
Una pollajería de 32 entre 139 y 140 sufrió un asalto ayer, en lo que sería un episodio de inseguridad más de no haber sido por una singularidad: los delincuentes eran dos pequeños de alrededor de 11 y 13 años, de acuerdo al testimonio de la víctima.

Todo comenzó a las 8.45, durante los primeros minutos de la jornada en este comercio ubicado en el barrio de La Cumbre. En ese entonces, la dueña estaba preparando milanesas, cuando irrumpieron dos pibes que en breve desnudaron sus verdaderas intenciones: “Entraron y cada uno sacó un cuchillo y comenzó a amenazarme para que le diera toda la plata”, comentó la empleada del negocio, Claudia Escobar (42), a Trama Urbana.
En pocos segundos, el clima se puso verdaderamente tenso: “Dame la plata porque si no, te clavo”, la intimidó el mayor de los cacos. Ante semejante amenaza, Escobar no dudó un solo instante en obedecer la exigencia de sus asaltantes. “Le entregué la recaudación, que era un poco más de 200 pesos”, ya que a esa altura del día mucho dinero no había juntado.
“Por suerte, en ningún momento amagaron con meterse atrás, porque ahí podría haber sido peor”, comentó aliviada la víctima. Luego de obtener el botín que habían ido a buscar, se dieron a la fuga y huyeron de la escena con rumbo desconocido a bordo de una bicicleta y corriendo, según el relato de un testigo.

El de 11, el “líder”
“Me llamó poderosamente la atención que el más grande de los chicos que me robó era el más asustado de los dos. En cambio, el más chiquito tenía una viveza bárbara. Se ve que tenía experiencia”, comentó la víctima.
Sobre la base de este relato, la Policía ahora intenta determinar si el joven asaltante estuvo implicado en otros atracos similares en la región, ya que sorprendió la destreza con la que se desempeñó durante el ilícito. “Es muy probable que tenga experiencia en el delito”, aseguraron fuentes policiales.
A Escobar no sólo le llamó la atención la edad de sus victimarios, sino también la hora en la que se produjo el hecho. “Es muy raro que ataquen a primera hora, porque es muy poca plata la que hay en el negocio, más dinero no se puede hacer”.
De hecho, desde que “Mi Primer Pollo” levantó la persiana, sólo un cliente había ingresado, el que pagó con un billete de 100 pesos que finalmente fue a parar a las manos de los malvivientes.

“Venía zafando”
En los últimos meses, varios han sido los negocios asaltados en esa zona de la ciudad y así lo han manifestado comerciantes del lugar. Sin embargo, a la pollajería en cuestión es la primera vez que la roban. “Veníamos zafando, ya que esta es la primera vez que nos roban, pero la zona está llena de casos de este tipo”, confirmó Escobar, que detalló que “en un kiosco robaron un montón de veces, lo mismo con una ferretería”.
Fuente: diariohoy.net