La estructura estaba en Figueroa Alcorta y Monroe para la entrega de premios, cuando un viento fuerte la tiró. Según la Ciudad, los organizadores no habían declarado que iban a colocar torres tan altas.
Lo que se suponía iba a ser una jornada festiva en los Bosques de Palermo, de entretenimiento al aire libre y con temperaturas ideales para hacer deporte, estuvo al borde de la tragedia. El maratón de la Universidad de Palermo ya había terminado cuando una torre de sonido se desplomó en la ceremonia de premios. Afortunadamente, no hubo víctimas que lamentar, pero once personas fueron atendidas con golpes y traumatismos. Al cierre de esta edición, una mujer se encontraba en estado grave por un traumatismo de cráneo.
La torre de sonido estaba montada en avenida Figueroa Alcorta y Monroe para la entrega de premios a los ganadores de la cuarta edición del maratón. Pero las fuertes ráfagas que se registraron en la Ciudad durante la mañana de ayer derribaron la estructura, al mismo tiempo que los ganadores esperaban sus trofeos al borde del escenario.
Entre los heridos, se encontraban dos chicos: uno de 10 años, que tuvo pérdida de conocimiento pero que se recuperó en el Hospital Pirovano, y una nena de un año, que debió ser trasladada al Fernández. Sin embargo, quien sufrió las peores consecuencias fue una mujer de 48 años, que fue llevada al Pirovano tras padecer un “traumatismo de cráneo muy severo y pérdida de conocimiento”, según informó el jefe de Guardia del centro de salud, Luis Rembichowski. La mujer, que también presentó “traumatismo de columna”, a la tarde fue derivada a un sanatorio privado.
El subsecretario de Deportes porteño, Francisco Irarrázaval explicó que la carrera estaba autorizada por el Gobierno de la Ciudad, pero que la Fundación Universidad de Palermo no había declarado que iba a colocar torres de sonido de tanta altura. Por su parte, Sebastián Tagle, titular del Club de Corredores, aclaró: “Nosotros nos ocupamos de la parte técnica de la carrera. El sonido fue contratado por la Universidad de Palermo”.
El maratón se había largado a las 9 sin inconvenientes en el Parque Tres de Febrero, de Palermo, con 7 mil corredores anotados en dos circuitos: uno competitivo de diez kilómetros y otro participativo de solo cuatro. La salida y la llegada estaban previstas sobre Figueroa Alcorta, entre Monroe y Juramento.
Pero la estructura de caño adornada con banderas interrumpió los planes pasadas las 10.40, cuando cayó sobre el público ubicado frente al escenario principal. Juan Carlos, uno de los maratonistas, afirmó que hasta el momento del accidente “había un muy buen clima y un grupo de música estaba terminando de tocar”.
Fuente: La Razón