Por una interna gremial, la tradicional línea de colectivos anunció un paro por tiempo indeterminado. Hubo momentos de tensión, incidentes y un herido de bala en Maschwitz.
Sin anunciarlo, un grupo de gremialistas de la línea 60 comenzaron en el mediodía de ayer un paro sorpresivo, que dejó sin colectivos a 300 mil pasajeros. Según denunciaron los sindicalistas, reclaman una deuda salarial y el reconocimiento de la empresa de los nuevos delegados. En ese contexto, durante el día hubo incidentes en la cabecera de Constitución, donde se produjeron empujones y agresiones entre sectores gremiales opuestos.
Según denunciaron los propios sindicalistas, en la cabecera que la empresa tiene en Ingeniero Maschwitz, hubo otro enfrentamiento entre los delegados que reclaman la personería gremial y supuestos integrantes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA). En esa pelea, un chofer terminó con una herida de bala en una pierna, según denunció Néstor Marcolín, un delegado.
“No se puede ejercer por la fuerza una Comisión Directiva si no tienen la legalidad correspondiente”, aseguró Gustavo Vasallo, delegado de la UTA. Y reconoció que un grupo de choferes de la línea 60 quiere apartarse del sindicato “madre” de los transportistas para formar un gremio paralelo. El mismo dirigente reconoció que hubo hechos violentos en la cabecera de Maschwitz. En este marco, el Ministerio de Trabajo citó a una reunión entre las partes para hoy a las 10.
Fuente: La Razón