Ambos deberán apurar las gestiones y cabildeos políticos para asegurarse el respaldo de cara a la segunda ronda electoral. Ciudad de Guatemala.- Dos días después de las elecciones presidenciales en Guatemala, el general retirado Otto Pérez Molina y el dirigente populista Manuel Baldizón empezaron a buscar posibles alianzas de cara a la segunda vuelta que disputarán el próximo 6 de noviembre.
Pérez Molina, postulado por el derechista Partido Patriota (PP), y Baldizón, del conservador partido Libertad Democrática Renovada (Lider) fueron los candidatos con más votos en los comicios presidenciales del domingo, informó DPA.
Pérez Molina dijo que su partido está abierto a dialogar con cualquier organización política «que se ubique en la línea del PP de defender los intereses de los guatemaltecos y del país».
«Tenemos que hablar con los otros partidos. Personalmente me sentaré a hablar con los dirigentes y se respetará su decisión de participar o de dejar a sus electores libres» para votar, indicó.
Baldizón, quien después de confirmarse su pase a la segunda ronda anunció que contrató a los asesores estadounidenses y especialistas en campañas políticas Ron Nehring y Tim Clark, también se declaró listo para buscar alianzas.
«La lucha apenas empieza, llamo a todos y todas a que nos unamos en una cruzada para caminar hacia adelante con la vista puesta en el futuro para vencer de una vez y por todas al pasado», puntualizó en un primer mensaje con miras a los comicios de noviembre.
Ambos deberán apurar las gestiones y cabildeos políticos para asegurarse el respaldo de cara a la segunda ronda electoral, indicaron hoy analistas.
Los aspirantes disputarán la segunda ronda electoral el próximo 6 de noviembre para definir al sucesor del presidente socialdémocrata Álvaro Colom, cuyo mandato de cuatro años termina el 14 de enero de 2012.
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) informó que, contabilizados el 98.78 de los votos, Pérez Molina cuenta con 1.598.167 sufragios (36.06 por ciento), y Baldizón 1.031.919 (23.27 por ciento). Para ganar en primera vuelta requerían más del 50 por ciento del total de votos válidos.
El analista Álvaro Pop afirmó que los dos finalistas enfrentan «el reto inmediato» de definir las alianzas con las fuerzas políticas guatemaltecas que les permitan consolidar un frente común que a su vez capte los votos de los ciudadanos que no votaron por uno ni por otro.
En esta definición de fuerzas consideró importante la conformación del «nuevo» Congreso Nacional (unicameral, 158 diputados), que se convertirá «en caja de resonancia» de las coaliciones políticas con miras a los comicios presidenciales de noviembre.
Según datos preliminares del TSE, con el conteo del 98.66 de los votos, el partido de Pérez Molina logró 57 escaños, y el partido del gobierno saliente, Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), que no presentó candidato a la presidencial, obtuvo 48.
El minoritario partido Unión del Cambio Nacional se constituyó en la sorpresa de la jornada al ubicarse como la tercera fuerza en el Congreso, con 14 diputados, junto con el partido Lider con igual número de representantes.
Pop opinó que las alianzas para la segunda vuelta tendrán mucho que ver «con las relaciones que se proyecten a futuro» entre las bancadas mayoritarias de los diputados y el nuevo gobierno encabezado por el PP o Lider.
El analista Manfredo Marroquín, director de Acción Ciudadana -una entidad que promueve la transparencia en la gestión pública- afirmó que los dos candidatos finalistas «están obligados a identificar sus fuentes de financiamiento de campaña y los compromisos que les han generado».
Fuente: eluniversal.com