El gobernador de Nuevo León Rodrigo Medina señaló que una de las principales hipótesis es que el ataque al Casino Royale fue en venganza porque los propietarios se negaron a ser extorsionados.
México.- El gobernador del estado norteño de Nuevo León, Rodrigo Medina, anunció hoy la captura de cinco personas vinculadas con el ataque incendiario a un casino en la ciudad de Monterrey que dejó 52 muertos.
El mandatario estatal dijo a la cadena Televisa que las autoridades buscan a otras dos personas y que más tarde podrían decir a qué grupo del crimen organizado pertenecerían, reseñó AP.
«Estamos ampliando la investigación, pero lo que es un hecho es que todos ellos participaron», afirmó el gobernador y agregó que los detenidos confesaron su participación.
Medina señaló que una de las principales hipótesis es que el ataque al Casino Royale fue en venganza porque los propietarios se negaron a ser extorsionados.
«De entrada lo que algunos de ellos manifiestan es alguna presión o extorsión que pudiera llevarse a cabo directamente a los propietarios», añadió.
El atentado ocurrió el jueves en Monterrey, capital de Nuevo León, y llevó al gobierno federal a declarar luto nacional por tres días y ofrecer una recompensa de 30 millones de pesos (unos 2,4 millones de dólares) por los responsables, a quienes el presidente Felipe Calderón calificó de «terroristas».
Una videograbación del incendio del jueves efectuada por cámaras de seguridad mostró a ocho o nueve sujetos que llegaron en cuatro vehículos e introdujeron bidones al Casino Royale, ubicado en una avenida comercial. En poco más de dos minutos, el casino estaba en llamas y columnas de humo negro salían del edificio.
El desató la indignación de prácticamente todos los sectores sociales.
El domingo, cientos de personas protestaron afuera del palacio de gobierno estatal en Monterrey y exigieron la renuncia del gobernador y el alcalde.
Interrogado sobre los llamados a que renuncie, Medina dijo a Televisa que no piensa dimitir aunque aseguró que entiende la indignación y desesperación de la gente.
La violencia en Monterrey y sus alrededores ha ido en aumento en los últimos meses, escalada que las autoridades atribuyen a una disputa entre los carteles rivales de Los Zetas y el Golfo.
La violencia atribuida al crimen organizado ha dejado más de 35.000 muertos en todo el país desde diciembre de 2006, cuando el gobierno de Calderón lanzó una ofensiva contra los carteles de las drogas.
EL UNIVERSAL