Los economistas Gustavo Cañonero, del Deutsche Bank, y Dante Sica, de la consultora Abeceb.com, coincidieron en que el gobierno que sea electo en octubre va a tener que enfrentar un contexto internacional adverso.
Ambos economistas disertaron en el marco del Pre Coloquio del Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) para la región Centro, que se lleva a cabo en la Bolsa de Comercio de Rosario.
Cañonero sostuvo que «el problema de los países centrales es crítico», de modo que impactará en un menor crecimiento económico mundial, lo que terminará afectando de algún modo a las economías emergentes.
El economista consideró que «existe un desacople» del comportamiento de las economías centrales de las emergentes, aunque aclaró que «eso no quiere decir que estemos aislados» y que si bien en el largo plazo los países en desarrollo «van a andar bien, en el corto van a sufrir».
Por caso, puso como ejemplo para enfrentar el contexto a los países del sudeste de Asia, donde los socios han incrementado la tasa de comercio intrarregional.
Cañonero agregó que América Latina «va a tener una desaceleración importante al 3,5 a 3,8 por ciento» para el próximo año y que «no se puede esperar la euforia del 2002, 2003 y 2004».
En cuanto a la Argentina, el economista del Deutsche, consideró que una probable reelección de la presidente Cristina Kirchner «puede ser una gran oportunidad» para poner en marcha políticas económicas «para enfrentar los condicionantes».
Dijo que el gasto primario en la Argentina creció del 17 al 25 del PBI en los últimos cuatro años, lo que sin embargo, a su criterio, «no sirvió para impulsar la inversión privada o sustituirla».
«En 2010 el sector público necesitaba 10.000 millones de dólares y el BCRA los financió con 9.000 millones. En 2011 se repitió esto, y en 2012 no va a haber ese financiamiento», dijo el economista quien no descartó que el gobierno recurra «a las reservas» para enfrentar la situación.
Por ello, dijo que si bien el resultado de las elecciones primarias revela que el público pretende mantener la condiciones actuales «la fuga de capitales refleja que no se sabe cómo sigue esto».
Por su lado, Sica hizo hincapié en la necesidad de que los empresarios entiendan que en el próximo ciclo la competitividad de las empresas no va a depender del tipo de cambio, sino más bien de sus inversiones.
Puso como ejemplo el caso del sector de fundición de hierro donde el parque de maquinarias es de e entre 20 y 30 años de antigüedad, y señaló que «el que no invierta ahora va a quedar afuera» del mercado.
El titular de Abeceb.com dijo que aún en medio de un escenario de corrección de desfasajes macroeconómicos, el tipo de cambio no va a ser determinante en la competitividad de las empresas.
Fuente: infobae.com