En su primera conferencia de prensa post descenso, Passarella contradijo a Buonanotte y afirmó que el club no recibió el 15 por ciento de su pase. “Tengo la conciencia muy tranquila”, se defendió.
Al frente, el Kaiser; a su espalda, la tropa completa. La situación lo ameritaba. La mecha que el domingo había encendido Diego Buonanotte había quemado más de lo previsto, había gestado un par de focos alternativos y amenazaba con hacer estallar el Monumental. Con la excusa de presentar al plantel para la temporada que se avecina en la B Nacional, Daniel Passarella dio la cara en conferencia de prensa para tratar de aportar algo de claridad sobre el destino del dinero del ya célebre 15 por ciento del pase del Enano al Málaga (alrededor de 450 mil euros), que el jugador jura haber cedido al club. Como mandan los libros de derecho, el presidente negó todo, aunque las explicaciones no evacuaron todas las dudas.
“¿Buonanotte miente?”, le preguntaron sin rodeos. Y Passarella, flanqueado por la plana mayor de la Comisión Directiva, respondió con un “sí” rotundo y cedió el micrófono a Daniel Mancusi, miembro del Consejo de Fútbol y uno de los apuntados por el incierto destino del dinero. “Buonanotte dejó de cobrar 458 mil dólares del contrato vigente y de la deuda que el club tenía con él. El club cumplió con lo estipulado en la normativa, le hemos pagado el 15 por ciento, con la retención de los impuestos”, detalló Mancusi. Enseguida, el ex capitán de la Selección recuperó el mando y salió al cruce de las acusaciones de irregularidades que llovieron en los últimos días y que alcanzaron los pases de Erik Lamela (a la Roma), Manuel Lanzini (a Fluminense) y Damián Lizio (a Bolívar): “Tengo la conciencia muy tranquila, no cometí ningún acto que confirme esas sospechas. No pueden hablar si no tienen pruebas”.
El rebote de lo dicho en el Salón de Honor del Monumental fue inmediato. “Diego perdonó el porcentaje de la prima y entregó el cheque del 15 por ciento en la negociación. De ahora en más, tienen que dirigirse a la Justicia”, disparó Mario Buonanotte, padre del Enano. Como en una zaga de misterio, los capítulos se suceden y el cheque sigue sin aparecer. ¿Quién lo tendrá?
Fuente: La Razón