Ya son más de 10.000 los súper chinos en el país

Impulsados por el boom de consumo que vive la Argentina, los comerciantes orientales retomaron el ritmo de 20 aperturas por mes que tenían hasta hace tres años, lo que, según sus propias mediciones, les permite contar con una red de más de 10.000 locales en todo el país y ventas por más de $25.000 millones anuales.
De la mano del fuerte crecimiento que vive el consumo, los comerciantes orientales retomaron el ritmo de veinte aperturas mensuales que tenían hasta hace tres años, lo que, según sus propias mediciones, en las últimas semanas les permitió contar con una red de 10.000 puntos de venta distribuidos en todo el país y ventas anuales por más de $25.000 millones.

Los chinos explican que el crecimiento del canal hoy ya no se registra en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, que muestran un grado de aperturas cercano a la saturación, sino en pequeñas localidades del interior del país, en las cuales recién están dando los primeros pasos, destaca en su edición de hoy el diario La Nación.

«El crecimiento del sector hoy se da básicamente a partir de la instalación de locales en el interior, en especial en ciudades pequeñas de menos de 30.000 habitantes, con un ritmo que volvió a ser de veinte aperturas diarias, después de tres años más tranquilos. Y a diferencia de lo que sucedió en Buenos Aires, ahora el crecimiento se concreta a través de la compra de fondos de comercio de supermercados y autoservicios que ya están en operaciones», explicó Miguel Ángel Calvete, secretario de la Cámara de Autoservicios y Supermercados Propiedad de Residentes Chinos (Casrech), una de las dos entidades que reúnen a los autoservicios chinos.

Según el último relevamiento realizado por Casrech, los autoservicios con más de 250 metros cuadrados de salón de venta ya suman 9.800 locales, a los que hay que sumar al menos otros 200 negocios más pequeños. La facturación promedio por local ronda los 8.000 pesos diarios.

En el sector explican que más del 60% de las aperturas actuales están concentradas en pequeñas ciudades y a cargo de comerciantes chinos que ya estaban en el país y ahora buscan expandir su inserción comercial.