River vivió una pesadilla en Córdoba y quedó al borde del precipicio

Belgrano le ganó 2-0 y lo dejó cerca de la B Nacional. Después del segundo gol, un grupo de hinchas ingresó al campo e increpó a los futbolistas. En la revancha no estarán Román, Ferrari y Almeyda…

Una noche de terror vivió River en Córdoba. El equipo millonario jugó un partido para el olvido, cayó 2-0 con Belgrano en el duelo de ida de la Promoción y quedó a un paso del descenso.

Con este resultado, el cuadro de Núñez deberá ganar el próximo domingo -en el estadio Monumental- por dos goles de diferencia (como mínimo) para no perder su lugar en la Primera división.

El encuentro, que se disputó en el Gigante de Alberdi, debió ser suspendido durante 20 minutos por un episodio bochornoso: después del segundo gol del Pirata, obra de César Pereyra, hinchas de River rompieron el alambrado e invadieron el campo de juego para increpar a sus jugadores.

El cotejo arrancó tenso, parejo, con dominio alternado en el mediocampo. Funes Mori exigió de entrada a Olave con un cabezazo y un rato después Mansanelli probó los reflejos de Carrizo.

No obstante, la paridad empezó a quebrarse con el correr de los minutos y Belgrano inclinó la balanza a su favor. El arquero millonario respondió con seguridad ante sendos intentos de Pereyra y trató de hacer despertar a sus defensores con gritos. Sin embargo, Adalberto Román cometió un penal infantil sobre los 23′ al tocar el balón con la mano tras un córner. Mansanelli no dudó y lo cambió por gol.

La visita apostó exclusivamente al talento de Lamela y se acercó con un par de tiros libres, pero no pudo generar peligro con frecuencia.

Y en el inicio del segundo tiempo llegó el segundo baldazo de agua fría: Lollo ganó de arriba, el Picante Pereyra la empujó a la red y River quedó al borde de un ataque de nervios.

Después del descontrol, el Millo fue con todo al ataque y estuvo cerca de descontar en varias oportunidades, pero falló. Si quiere mantener la categoría, el domingo no podrá fallar.

Explotaron, entraron a la cancha y exigieron actitud

Minutos después del segundo gol de Belgrano, hinchas de River rompieron el alambrado, invadieron el campo e increparon a algunos de sus jugadores. Los descontrolados simpatizantes exigieron actitud y se la agarraron principalmente con Carlos Arano y a Adalberto Román, a quienes empujaron. Los casi 3 mil hinchas de River, situados en la cabecera lateral, habían hecho, al menos, seis pequeños agujeros a lo largo del tejido del alambrado perimetral. Néstor Pitana tomó nota rápidamente de la situación, se interpuso ante una eventual agresión y llamó a la Policía provincial para que tome cartas en el asunto.

De este modo, las autoridades policiales dispusieron que un cordón de alrededor 25 efectivos de Infantería se colocara dentro del campo de juego, mirando hacia la tribuna, para evitar una nueva invasión de la gente.

Tras 20 minutos de descontrol, el juego pudo reanudarse.

Tres bajas sensibles para la revancha

Juan José López deberá planificar la formación para el partido revancha ante Belgrano sin tres titulares. Adalberto Román, Paulo Ferrari y el capitán Matías Almeyda llegaron ayer a la quinta amarilla y no podrán jugar en el Monumental. Tres grandes problemas para Jota Jota.

Fuente: diariohoy.net