El juicio a un oficial subinspector de la Policía Federal acusado de haber matado de cinco balazos en 2010 a un cabo del Servicio Penitenciario provincial, en la feria de La Salada en la localidad bonaerense de Ingeniero Budge, comenzará hoy en los Tribunales de Lomas de Zamora.
El debate empezará a partir de las 9 ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 5, presidido por María del Carmen Mora e integrado por Guillermo Puime y Pedro Pianta, donde será enjuiciado Osvaldo Abel Galiñanes (31) por el «homicidio simple» de Oscar Ramón Garín (29), cometido el 2 de agosto de 2010.
En el juicio, donde se prevé que declaren unos 70 testigos, el fiscal será Bernardo Schell, mientras que el acusado estará representado por el abogado Román Makinistian, el cual adelantó a Télam que «sostendrá la inocencia» de su defendido, quien se encuentra detenido desde hace nueve meses.
La instrucción de la causa fue encabezada por el fiscal Juan Manuel Baloira, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2, del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
Según el acta de elevación a juicio al que tuvo acceso Télam el acusado, apodado «El ruso», era el encargado de la seguridad de la feria denominada Cooperativa 27 de Mayo Limitada, ubicada en la calle Rivera Sur y Ana Goiri, de Ingeniero Budge, y la víctima uno de los custodios.
La investigación estableció que Galiñanes se encontró con Garín el 2 de agosto de 2010 alrededor de las 22.30 y le efectuó cinco disparos con una pistola calibre .22 con silenciador, de los cuales uno impactó en el tórax y los otros cuatro en el rostro de la víctima lo que le ocasionó la muerte en el lugar.
Luego de los disparos, el ex policía que prestaba servicios en la comisaría 39na. de la Capital Federal, recogió cada una de las vainas servidas salvo una, la cual fue encontrada por los peritos balísticos al lado de una escoba, de acuerdo a la acusación fiscal.
Además, se sospecha que el imputado introdujo en el interior de la boca de la víctima un billete de dos pesos para desviar la investigación y aparentar un crimen mafioso.
Supuestamente, el móvil del crimen fue por cuestiones monetarias ya que Garín le exigió a su entonces jefe el pago de la quincena y, que en caso contrario, iba a «destapar la olla» respecto a una supuesta estafa de Galiñanes a la cooperativa que manejaba la feria.
Marta Garín, hermana de la víctima, aseguró a Télam que «Galiñanes disminuía la cantidad de efectivos de custodia y se quedaba con el dinero sobrante que le entregaba la Cooperativa».
En ese sentido, el abogado interventor de la Cooperativa, José Fidemi, declaró en la etapa de instrucción que por el servicio de custodia del predio se pagaban 23.000 pesos por quincena, por una cantidad de 12 pesos por hora por cada hombre.
Fidemi dijo que los días de feria se pagaban por unos doce efectivos y los días restantes por dos, lo que hacía el total de la mencionada cifra.
Según el expediente del fiscal de instrucción, esta declaración robustece la presunción del móvil del asesinato respecto a una cuestión dineraria, dado que la víctima iba a contar esta situación al responsable de la intervención, quien en total pagaba unos 46.000 pesos mensuales por la seguridad del predio.
El imputado fue puesto a disponibilidad en la fuerza un mes después del crimen.
Fuente: Telám