En primavera aumentan los casos de meningitis

Especialistas revelaron que la mayoría de los brotes de la enfermedad se producen en esta estación y el principal grupo de riesgo son los niños. La meningitis por meningococo C es una enfermedad que conlleva riesgo de muerte. Y generalmente se presenta en niños menores de 1 año y en los que tienen entre 1 y 5.

Esta estación del año es la de mayor riesgo ya que los gérmenes empiezan a circular con el cambio de temperatura.

La meningitis es la inflamación de los meninges, que es el nombre que reciben las membranas que recubren el sistema nervioso central, como el cerebro y la médula espinal. Las meninges están bañadas por el líquido cefalorraquídeo.

Diversas causas ocasionan la inflamación de las meninges. Entre las infecciosas, los virus y las bacterias son las más frecuentes.

El problema principal es que no es fácil diferenciar si la meningitis es viral o bacteriana, es por eso que debe realizarse una punción lumbar para extraer una muestra de líquido cefalorraquídeo, que permite hacer un diagnóstico con certeza.

Se registran por año entre 200 y 300 casos de meningitis. Entre un 10 y un 15% de los niños fallece en los primeros días.

Este tipo de meningitis (meningococo C) es una enfermedad que se trasmite por contagio. El hábitat natural de las bacterias que la provocan son la garganta y la nariz, pero sólo en algunas personas penetra en el cuerpo y produce la enfermedad.

Los síntomas de la enfermedad son fiebre y escalofríos, dolor de cabeza intenso, náuseas y vómitos, cuello rígido, sensibilidad a la luz y alteración del estado mental. Dada su veloz evolución, requiere de atención médica inmediata ya que sin tratamiento puede causar la muerte en menos de 24 horas.

También puede haber síntomas adicionales que se asocian a esta enfermedad como disminución del estado de conciencia, respiración rápida, inquietud, alimentación deficiente o irritabilidad en los niños.

En la Argentina, alrededor de un 20% de los casos de meningitis bacteriana que se presentan es meningocócica y, de esta cantidad, un 20% corresponde a meningococo C (según el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud e Instituto Malbrán). Este tipo de meningitis puede dejar graves secuelas tales como discapacidad mental o incluso provocar la muerte.

Formas de prevención

Vacunación: está indicada para la inmunización activa de bebés a partir de los 2 meses, niños, adolescentes y adultos. Puede administrarse junto a otros antígenos como la vacuna séxtuple u otras, así como con la vacuna de sarampión, rubéola, etcétera. Por eso es importante consultar al pediatra.
Lactancia materna: es imprescindible para reforzar el sistema inmunológico. Es necesario promover la lactancia y preservarla ante las dificultades que pueda presentar, ya que las madres optan por las mamaderas mucho antes de lo aconsejable, que son los 6 meses.

Evitar ambientes cerrados: no permanecer en sitios contaminados con gérmenes o viciados de humo de cigarrillo ya que impiden el recambio del aire y favorecen la irritación en las vías respiratorias. Es importante fomentar la ventilación de los ambientes en lugares con alta concentración de personas.
Cuidar la higiene personal y del hogar: lavarse las manos antes de consumir alimentos y luego de ir al baño. Debe ponerse especial énfasis en la limpieza y desinfección de pisos y baños, utilizando agua y lavandina. En el caso de comedores de escuelas, jardines de infantes y guarderías es importante no compartir vasos, utensilios, caramelos, toallas, chupetines y chupetes.

Consultar al médico: ante la existencia de cualquier síntoma recurrir a un especialista. Ante la sospecha de que el niño pueda tener meningitis o alguno de los síntomas hay que acudir a un servicio de urgencia o llamar al pediatra, pero nunca darle medicamentos por cuenta propia.

Fuente: diariohoy