Cuatro jóvenes serán sometidos a juicio oral y público acusados del crimen de José Darío Duarte, un empleado telefónico que murió el año pasado luego de ser golpeado por una patota, a la salida de un local bailable, en la ciudad bonaerense de Mercedes, informaron fuentes judiciales.
El juez de Garantías Marcelo Romero dispuso en los últimos días la elevación a juicio de la causa por el homicidio de Duarte (26), oriundo de Olavarría, quien se cree que fue víctima de una patota de al menos una decena de jóvenes, de los cuales seis lograron ser identificados.
Los acusados son Andrés Gerlo, Agustín Canelas, Ignacio Zunino y su hermano Tomás Zunino, de entre 18 y 20 años, todos imputados del delito de «homicidio en riña», el cual prevé una pena de entre dos y seis años de cárcel.
Las fuentes explicaron que ahora que el expediente fue elevado se sorteará el tribunal que estará a cargo del debate, el cual se estima que se realizará a mediados de año.
En tanto, dos menores también serán sometidos a juicio como acusados del homicidio, pero ante un tribunal del Fuero Penal de Responsabilidad Juvenil.
La muerte de Duarte ocurrió el 12 de abril de 2010, producto de la golpiza que había recibido dos días antes, en la ciudad de Mercedes.
Cerca de las 7 del 10 de abril, en la avenida 29 entre calles 18 y 20, en el centro mercedino, la víctima y Matías Verna, un amigo y compañero de trabajo, se retiraron del boliche «Le Front».
Según los investigadores, los jóvenes caminaron por la avenida 29 hasta que comenzaron a discutir con dos muchachos que se hallaban acompañados por dos chicas y con los que luego se originó una pelea a trompadas.
A esos disturbios se sumaron otros cinco chicos que se encontraban a pocos metros y, de acuerdo con la pesquisa, todos juntos le pegaron a Duarte, ya que su amigo logró escapar y se alejó a la carrera.
Duarte recibió trompadas, patadas y cintazos en distintas partes del cuerpo, hasta que quedó inconsciente, tirado sobre el asfalto.
Allí fue auxiliado por otras personas que observaron lo ocurrido y llamaron a la Policía, tras lo cual fue trasladado al Hospital de Mercedes, donde quedó internado en terapia intensiva.
Debido a la gravedad de las heridas, el muchacho fue llevado finalmente al Hospital de Isidro Casanova, donde fue intervenido quirúrgicamente y murió tras agonizar dos días.
Por su parte, el joven Verna sólo sufrió lesiones leves y fue atendido en el lugar por médicos que fueron alertados por vecinos.
El abogado Néstor Di Giano, representante a la familia Duarte, dijo a Télam que si bien su intención era que los acusados fueran a juicio imputados de «homicidio simple» en este tipo de casos es difícil probar los roles.
Al respecto, dijo que está conforme con la calificación de «en riña», pese a tener una pena mucho menor que puede derivar en la libertad de los acusados, pese a ser hallados culpables.
Por su parte, Patricia, viuda de Duarte, contó que mañana realizarán una marcha de silencio desde la plaza central de Mercedes hasta el lugar del homicidio, donde reclamaran a la Justicia el rápido comienzo del juicio oral.
«Que los asesinos de mi marido paguen por lo que hicieron. Lo necesito por mi hijo, al que dejaron sin padre tan chiquito, y por la justicia», agregó la mujer.
Patricia recordó que, cuando lo mataron, su marido se hallaba en esa ciudad desde hacía unos 20 días, cuando había ido a trabajar para una empresa de telecomunicaciones, contratista de Telefónica de Argentina.
Fuente: Telám