Las estadísticas confirman la grave crisis económica ibérica y sus consecuencias: España dejó de ser la tierra prometida para muchos de los argentinos que llegaron hasta este país con la ilusión de llevar una vida mejor.
De acuerdo con un estudio oficial del Instituto Nacional de Estadística español (INE), 12.237 argentinos decidieron dejar de vivir en España entre el primero y el último día de 2010, en un proceso de fuga récord para el total de los inmigrantes extracomunitarios que abandonaron el país. En este grupo, la Argentina es el cuarto Estado que más contribuyó al déficit inmigratorio en España, luego de Ecuador (con 40.510 ciudadanos, que en su mayoría regresaron a su país), Colombia (20.868) y Bolivia (15.274).
En el total general, y aun con la suma de los extranjeros comunitarios (oriundos principalmente de Rumania y de otros países de Europa del Este), la población no nacida en España disminuyó el 0,3%. Esta variación negativa fue interpretada por diversos analistas como un sensible indicador del empeoramiento de las variables macroeconómicas, ya que en los años de mayor crecimiento de la productividad, como en 2001 y 2002, la inmigración alcanzó picos de crecimiento del 48% y del 44%, respectivamente, un ritmo de evolución sin parangón entre las economías europeas.
Fuente: La Nación