Cansada de los ninguneos y de las mentiras del gobierno en relación a los jubilados, la oposición lanza una nueva pelea legislativa a favor del 82% Móvil. Ahora pide que se llame a una consulta popular para saber la opinión de la sociedad respecto a este tema. Críticas desde el oficialismo a un proyecto que busca reivindicar a los eternos olvidados del sistema.
El año pasado el Congreso nacional sancionó la ley que daba el tan postergado 82% Móvil a la clase pasiva, concluyendo de esa manera lo que se creía una deuda histórica que mantienen los gobernantes con los más viejos. Pero la alegría para los jubilados no duró mucho, ya que la presidenta Cristina Fernández vetó la iniciativa por considerarla una “ley de quiebra del Estado” que iba en contra de los destinos de la Nación.
La oposición advirtió desde ese momento que ni bien empezara el nuevo año legislativo, seguiría impulsando la idea de saldar la deuda con los jubilados, algo que desde el gobierno intentan debilitar con un anuncio hecho por la Jefa de Estado de aumentar las jubilaciones a partir de marzo en un 17,33%, elevando la mínima a los 1.227 pesos, algo que los analistas económicos aseguran ni siquiera llega a cubrir el 50% de la canasta básica de los jubilados.
Estas acciones del gobierno, que desde muchos sectores de la sociedad son tomadas como una burla a los intereses de quienes trabajaron toda una vida para tener una vejez digna y reciben a cambio un maltrato generalizado por parte de las autoridades nacionales, que hacen que se pasen más contrariedades que bondades.
Conscientes de esta situación en la clase pasiva, es que la oposición iniciará este año legislativo con un proyecto cambiando el eje de la temática, al advertir que buscará que el mismo sea plebiscitado en una consulta popular, algo a lo que desde el kirchnerismo se oponen en forma sistemática, ya que saben que si el mismo llega a la calle en forma de consulta, recibirían una profunda derrota en pleno año electoral.
El proyecto, que cuenta con la firma de los bloques del radicalismo, el Socialismo y el GEN, entrará en Diputados y pedirá llamar a una consulta popular de carácter vinculante por la cual la ciudadanía podrá manifestarse a favor o en contra del 82% para las jubilaciones, tal como se expresa en el artículo 40 de la Constitución nacional.
La principal crítica que se hace desde el oficialismo a la iniciativa opositora, es que no especifican de dónde se van a sacar los casi 32.000 millones de pesos que se necesitan para abarcar los aumentos instantáneos que sufrirían las jubilaciones con el sancionamiento de la misma, y la acusan de buscar réditos políticos con las necesidades de los que menos tienen y más sufren las consecuencias del modelo económico.
Desde la oposición remarcan tener los números para sacar este proyecto de consulta popular en la cámara de Diputados, ya que ahí son mayoría y contarían con el apoyo de independientes y la centroizquierda para este proyecto, algo que no pasaría en Senadores, donde la oposición no tiene la mayoría, y el oficialismo cuenta con socios estratégicos en diferentes proyectos, como lo son Carlos Menem y Roxana Latorre.
Es en esta cámara donde el oficialismo cuenta con la posibilidad cierta y concreta de tirar abajo una de las iniciativas que más le preocupa que se lleven adelante, ya que sabe que en caso de concretarse dicha consulta, no cuenta con la más mínima posibilidad de conseguir un triunfo en las urnas, dándole un triunfo a la oposición en un año donde se sabrá en octubre quien será el conductor de las Argentina por los próximos cuatro años.
De esta manera, el kirchnerismo vuelve a ponerse en contra de los intereses de la inmensa mayoría de los ciudadanos del país que piden esta ley a los gritos, y se echó por tierra con uno de los proyectos que mejor intentaba redistribuir la riqueza en nuestro país, y saldar una de las deudas centrales que tiene la dirigencia argentina con la clase pasiva.
Fuente: www.agenciacna.com