«The Importance of Being…», un proyecto que desde mañana y hasta el 4 de octubre reúne obra de 40 artistas belgas desde los años 60 a la actualidad en el porteño museo Macba, invita a reflexionar sobre las nociones del ser, a través de una cartografía que funciona como experiencia sensorial e invita a generar recorridos personales que escapan a las definiciones monolíticas.
Curada por la cubana Sara Alonso Gómez, la exhibición cuyo título emula a «La importancia de llamarse Ernesto» -comedia de Oscar Wilde sobre las costumbres y solemnidades sociales-, incluye la realización de ‘site specifics’ y actividades paralelas de la mano Marcel Broodthaers, Chantal Akerman, Francis Alÿs, Charif Benhelima y Guillaume Bijl entre otros artistas invitados al Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires (Macba), ubicado en San Juan 328.
Se trata de «cuatro generaciones de artistas que invaden todo el museo, en una mega muestra basada en la generación de sensaciones y un recorrido impactante que propone el registro de la vivencia personal», dice a Télam la curadora Alonso Gómez, especialista en Arte Contemporáneo Latinoamericano formada en La Habana y La Sorbona.
«Es la primera vez que una exposición de esta escala se realiza fuera de Bélgica», destaca el crítico e historiador Laurens Dhaenens en torno a la capacidad reflexiva del proyecto que desde hace tres años aborda la identidad desde adentro de Bélgica y a partir del espejo que propone cada nueva geografía que visita; la primera fue Cuba meses atrás y las próximas serán Río y San Pablo, en 2016.
Ocurre que «Bélgica es un país muy complejo, cuya identidad se encuentra probablemente en la imposibilidad de clasificación, en la diversidad de contextos y lenguas», asevera por su parte Bruno Devos, publicista y creador de la iniciativa que busca definir un panorama del arte de ese país a través de artistas como Michaël Borremans, Dirk Braeckman, Jacques Charlier y David Claerbout.
«Existe una especie de balcanización de las comunidades belgas que impide culturalmente la realización de exposiciones de esta envergadura», retoma Alonso Gómez, responsable de la llegada a Argentina de obra de Leo Copers, Patrick Corillon, Cel Crabeels y Berlinde De Bruyckere entre muchos otros.
«La política -continúa la curadora-, tiene un peso extremadamente fuerte en la cultura belga», una megaestructura a la que escapa el proyecto integrado por Jan De Cock, Peter de Cupere, Carl De Keyzer, Raoul De Keyser, Edith Dekyndt y Wim Delvoye entre otros; y así delínea un panorama ajeno a clichés como el socialismo, la sátira o la ironía.
Esta exposición «es muy controversial en Bélgica porque de alguna manera es bastarda -apunta Alonso Gómez-, no tiene ningún representante comunitario y esa autonomía los afecta porque no es costumbre, a diferencia de Latinoamérica», que pareciera empoderarse de las prácticas autónomas.
Su interés en esta exhibición, repasa, es que «el visitante cree su recorrido y que todo lo vea a partir de su propia experiencia, a eso se refieren los tres puntos suspensivos del título (la importancia de ser…): son el espacio para cuestionarse la propia noción de ser», agrega.
La muestra es una especie de imagen que el espectador devuelve a través de su experiencia: La pieza sonora del ingreso cuestiona la creación de espacios únicos y conservadores; un gran collage con recortes de diarios locales contrapone realidades; tensiones judiciales y políticas; el mundo del entretenimiento… cada geografía reformula la exhibición, le da un carácter peculiar.
«En la experiencia que tuvimos en Argentina nos dimos cuenta de que el rol social de la mujer es súper importante -detalla la curadora-, cuando miro la configuración de un equipo de trabajo como el del Macba, veo que casi todas son mujeres; cuando veo cómo se establecen las dinámicas urbanas, me doy cuenta también que las mujeres tienen una posición fundamental».
Para Alonso Gómez «esto es muy interesante, especialmente cuando en Europa, en la mayoría de los países, la cabeza de las instituciones casi siempre son hombres, es decir, ellos iniciaron la revolución por los derechos de la mujer pero los latinoamericanos los desarrollamos aún más», sonríe quien además integra la Unión de Escritores y Artistas Cubanos (UNEAC).
Mediante un esfuerzo conjunto con la Embajada de Bélgica, Macba exhibe en sus salas una propuesta que intenta mapear la producción artística de ese país en las últimas décadas y donde la geografía es una plataforma de estudio en la que persisten la pluralidad de discursos y cuestionamientos en torno al poder, las líneas de frontera, la memoria y la otredad.
Los artistas que participan son también Fred Eerdekens, Jan Fabre, Michel Francois, Kendell Geers, Johan Grimonprez, Marie-Jo Lafontaine, Jacques Lizène, Hans Op de Beeck,, Walter Swennen, Ana Torfs, Pascale Marthine Tayou, Joëlle Tuerlinckx y Philippe Vandenberg.
Junto a Koen van den Broek, Anne-Mie Van Kerckhoven, Koen Vanmechelen, Lieve Van Stappen, Burno Vekemans, Angel Vergara Santiago, Ann Veronica Janssens, que completan la exposición.
De alguna manera la relación que el visitante establece con las obras termina siendo muy abstracta y por eso se confeccionó un programa paralelo de charlas, conferencias e interacciones entre artistas locales y belgas para poner las obras en contexto.
En ese marco, Alonso Gómez hará una visita guiada, mañana a las 12, sobre las perspectivas con que pueden pensarse las obras expuestas; y de 15 a 18 se realizará un taller de análisis sobre el rol de la crítica en el arte contemporáneo.
En tanto que el lunes próximo a las 17.30 en el auditorio del sexto piso del museo, Dahenens, la curadora y Sebastián Vidal Mackinsonse disertarán sobre trasvasar la identidad geográfica; y a las 19.30 habrá una conversación abierta entre Ángel Vergara Santiago y Rafael Spregelburd, coordinada por la directora del museo, Teresa Riccardi.
Entre otras actividades, los sábados 25 de julio y 1 de agosto, a las 17, la fotógrafa Catalina Bartolomé coordinará un taller sobre la historia y vigencia del retrato actual; el 18 de julio a las 15 habrá un taller de dibujo sonoro; y el 29 de agosto, de 11 a 16, se dictará una capacitación docente sobre la relevancia de trabajar el arte contemporáneo en las escuelas.
Mientras que todos los fines de semana de agosto 15 a 19 Mariana Rodríguez Iglesias coordinará una obra de Julien Friedler en la que un visitante leerá uno de los 39 textos del artista.
Fuente: www.telam.com.ar