Toda la fachada del consulado de Italia en El Cairo, Egipto, dejó hoy un muerto y diez heridos al estallar una bomba.
El consultado estaba cerrado en el momento del ataque, que dejó también sus secuelas en otras viviendas de los alrededores, en el barrio de Bulaq Abu Laela.
Los explosivos estaban colocados en un vehículo estacionado frente al consulado y fueron detonados por control remoto, indicó el Ministerio del Interior en un comunicado, en el que reseñó que todas las víctimas son civiles.
El portavoz de Sanidad, Hosam Abdelgafar, explicó por su parte a la televisión oficial egipcia que los heridos fueron trasladados a cuatro hospitales de la zona con contusiones y quemaduras y que algunos continúan en observación.
La embajada de Italia en El Cairo envió un mensaje a sus ciudadanos residentes en Egipto en el que les recomendó «aumentar las precauciones y limitar los movimientos».
Hasta ahora, ningún grupo ha reivindicado la autoría del atentado y no está claro si el objetivo era el consulado italiano.
El juez egipcio Ahmed Fudali, firme partidario del presidente, Abdelfatah al Sisi, dijo a Efe que el atentado iba dirigido contra su persona y que se trató de «un intento de asesinato».
Fudali explicó que se encontraba en la asociación de Jóvenes Musulmanes, cuya sede está frente al consulado y en la que ocupa un alto cargo, y que abandonó el área poco antes de la explosión.
Según su versión, el coche bomba no pudo ser estacionado en la misma puerta de la sede de la asociación ante la presencia de policías que custodiaban el lugar y prohibían a los vehículos aparcar.
Fuente: Diario Hoy