El “Alemán” Javier López mete un solo cambio: el ingreso del pibito Villarruel por el desgarrado Braian Romero. Todos esperan un partido de mucho roce en el estadio “gasolero”.
Hace dos fechas todos pensaban que Colón y Javier López iban de punto al Gigante de Arroyito… a poner la cabeza. Es que Colón no podía ganar y encima Central era único puntero e invicto. Sin embargo, no sólo que no perdió sino que lo pudo ganar. En la fecha siguiente, se sacó la mufa en Santa Fe, ganándole a Olimpo de Bahía Blanca. Esta noche, desde las 21.10, los sabaleros llevarán su evidente mejoría hasta la complicada canchita de Temperley, en Turdera, para enfrentar a un duro equipo el recordado Ricardo Rezza.
Casualmente, si hubo un muchachito de la película en estas dos estaciones de resurrección en Colón —Central y Olimpo—, ése fue Braian Romero, un desconocido jugador de Acassuso apuntado por “Mostaza” Merlo (por lo visto, alguna cosa bien hizo el autor del “Paso a Paso”). El carrilero derecho fusiló en cancha de Central y armó una mandada espectacular contra los de Bahía: dos goles en dos partidos y cuatro puntos de seis para el sabalero.
Como consecuencia de un pequeño desgarro, no podrá ser titular hoy frente a Temperley y su reemplazante será el pibito Villarruel. Si bien el PF (ver aparte las declaraciones) del plantel le bajó los decibeles a la gran polémica por el tema física, la muy mala pretemporada con Merlo y la cantidad importante de lesionados, los casos de Alario y Romero son más que evidentes.
En el caso de Braian Romero, porque ante la menor duda, la idea es no arriesgarlo, a pesar que el mismo volante “pidió jugar”. Y en cuanto a Alario, lesionado frente a Boca en la cuarta fecha, ni siquiera viajó. Ya pasaron Racing, Tigre, Central, Olimpo y Temperley: hace rato que se cumplieron los famosos 21 días. Sin embargo, la decisión en conjunto del mismo “Pipa” con el cuerpo técnico es “esperar hasta Rafaela”. Es imposible no suponer que “todo tiene que ver con todo” y que Colón toma muchos más recaudos con los tiempos y las gravedades de las lesiones de los futbolistas.
El entrenador sabalero fue más que claro cuando anticipó para esta noche un partido con mucha intensidad, donde las segundas pelotas serán claves y el juego aéreo puede ser determinante si alguno de los dos se distrae.
Desde las 21.10, la mejoría sabalera llega hasta la Estación Temperley. La idea, claro está, es parar, sumar y seguir viaje. No sería aconsejable ahora que, después de empatar con Central y ganarle a Olimpo, a este Colón 2015 se le ocurra descarrilar.
Las curiosidades del historial
En la sumatoria de todas las categorías, Temperley y Colón jugaron 36 partidos, de los cuales Colón ganó 22 (84 goles), Temperley ganó 6 (44 goles) y empataron 8.
— El primero del historial. Se jugó el 28 de mayo de 1949 por la séptima fecha y Colón ganó 2-1. Temperley alistó a: Sanseverino; Propato y Berrud; Carrera, Gegundez y Bordón; Re, Héctor García, Leone, Savino y Petirosi.
Colón salió con Tenuta; Eulalio Gómez y Sabotig; Rebecchi, Ricardo Pacífico Ramírez y Bonacci; Belén, Canteli, Raúl Frutos, Dorado y Valentini.
Colón arrancó ganando con un gol de Canteli a los 30 minutos del primer tiempo y un ratito después empató Petirosi, desnivelando Eulalio Gómez para el sabalero. El detalle: Leone, de Temperley, desvió un penal. El juez fue Carlos Nai Foino y se recaudaron 1.556,50 pesos de la época.
— Se enteraron en Santa Fe. El domingo 26 de mayo de 1957 Colón recibió al Celeste en la cancha de Gimnasia y Esgrima de Santa Fe, debido a que su estadio se encontraba clausurado porque una gran inundación había afectado las instalaciones. Varios simpatizantes de Temperley que viajaron para presenciar el partido, se enteraron del cambio de escenario cuando llegaron a la ciudad de Santa Fe.
— El último cruce. Fue el 6 de mayo de 1989 por fecha 39 del Nacional “B” de ascenso. Terminaron 0 a 0. Temperley alistó a: Medina; Aguilar, Franchini, Casanueva y Bottari; Salas, Legaspi (Porto) y Seco; W.Martín (Langenheim), W.Villalba y Azerrad. El técnico era Roberto Iturrieta.
Colón lo hizo con: Wirzt; Escobedo, Monti, Godano y Míguez; Wolheim, Toledo y Chaparro; Héctor López (Mozas), Javier López (Argota) y Verdirame. El entrenador era Orlando Medina. Dirigió Carlos Coradina.
Fuente: El Litoral