Celso Neri Maidana era un prefecto de 46 años que fue asesinado de un balazo frente a su familia en Ringuelet, en la madrugada del 26 de febrero del 2013: en medio de un incidente vecinal, el hombre recibió un tiro de un revólver calibre 22 que ingresó por la cintura y en su recorrido complicó riñones, el hígado y la vejiga, por lo que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en el San Roque de Gonnet, aunque terminó perdiendo la vida.
Desde ese momento el responsable del disparo se mantuvo prófugo, aunque los efectivos de la comisaría Undécima, bajo las normativas de su comisario Ricardo Astopini, continuaron investigando y centraron la sospecha en un individuo que, al momento del ataque, era menor de edad.
De esta manera, en las últimas horas recibieron desde fiscalía la orden de captura y anteanoche se dirigieron a una Iglesia Evangélica –que también funciona como casa- ubicada en 526, 27 y 28, en donde lograron la detención del presunto responsable del ataque. Se trata de un joven de 19 años que “se volcó a la religión de tal manera que, al vernos que fuimos a detenerlo, se entregó mansamente, asegurando que era un guerrero de Dios”, dijo una fuente.
Sobre la manera que dieron con el sujeto, quien vivía en ese lugar junto a sus padres y tenía además otra Iglesia en 152, 71 y 72 de Los Hornos, el pesquisa reveló que “fueron años de investigación que nos permitieron llegar hasta él. Sabíamos adónde vivía, pero no conseguíamos la orden de detención, que recién nos dieron ahora ya que acumulamos muchas pruebas en su contra”.
Fuente: Diario Hoy