Sorprendentes resultados de un nuevo estudio muestran cómo un determinado estado de ánimo puede afectar tu salud.
Nuevos hallazgos revelan que enojarse mucho no sólo es incómodo para las personas que te rodean, sino que también puede aumentar de manera significativa el riesgo a corto plazo de sufrir un ataque cardíaco.
De hecho, tener un episodio de enojo intenso se asoció con un riesgo 8,5 veces mayor de sufrir un ataque cardíaco en las siguientes dos horas, según un estudio publicado por “The European Heart Journal – Acute Cardiovascular Care”. Estos nuevos resultados se suman a los de otros estudios anteriores que sugerían que los altos niveles de enojo podrían gatillar un ataque cardíaco.
El estudio observó a 313 personas a las que se las estaba tratando en un hospital por un ataque cardíaco. A los hombres y mujeres se les pidió que completaran un cuestionario sobre el nivel de enojo que habían experimentado en las últimas 48 horas, basándose en la siguiente escala numérica:
1. Calmo.
2. Ocupado, pero sin fastidio.
3. Ligeramente enojado, irritado y fastidiado, pero no se nota.
4. Moderadamente enojado, pero tan fastidiado que se nota en su voz.
5. Muy enojado, con el cuerpo tensionado, los puños apretados, listo para explotar.
6. Furioso, forzado a mostrarlo físicamente, casi fuera de control.
7. Encolerizado, fuera de control, tirando objetos, lastimándose a sí mismo o a otros.
Un nivel de enojo mayor que cinco en las dos horas previas a haber sufrido el infarto fue reportado por siete de los participantes del estudio y uno de los participantes experimentó este grado de enojo hasta cuatro horas antes del episodio cardíaco.
Dos personas reportaron un nivel cuatro de enojo dentro de las dos horas previas al infarto, mientras que tres personas habían experimentado ese nivel de enojo en las cuatro horas previas.
Según los investigadores, los resultados revelan un aumento en 8,5 veces del riesgo relativo de sufrir un ataque cardíaco en las dos horas posteriores a un enojo severo. Las personas que reportaron altos niveles de ansiedad también tuvieron un mayor riesgo.
Si bien el estudio es pequeño y por lo tanto es temprano para determinar cuán importante es el enojo intenso como factor predictor de un ataque cardíaco, la investigación brinda a los profesionales información sobre cuáles factores emocionales pueden gatillar un ataque cardíaco.
Por ejemplo, los investigadores hallaron que en el ránking de los principales causantes de altos niveles de enojo estaban en primer lugar las discusiones con miembros de la familia, seguidas por las discusiones con personas que no eran miembros de la familia, los enojos en el trabajo y los enojos al manejar.
“Nuestros hallazgos resaltan la necesidad de evaluar estrategias para proteger a los individuos en mayor riesgo durante los momentos de enojo agudo”, concluyeron los autores.
Por el momento se desconoce de qué forma exacta el enojo puede gatillar un ataque cardíaco, pero los científicos especulan con que el estrés puede estimular la actividad cardíaca, con un mayor ritmo cardíaco y mayor presión arterial, estrangulamiento de los vasos sanguíneos, rotura de la placa y coagulación, lo cual puede eventualmente conducir a un ataque cardíaco.
Fuente: Infonews – Doctor Vid